La reconstitución del sacrificio del lactante se extendió por tres horas y treinta minutos.
El MercurioQUILPUE.- Tres horas y treinta minutos duró la reconstitución del sacrificio del lactante, hijo de Natalia Guerra y Ramón Castillo, líder de la denominada secta de Colliguay, quien se hacía llamar "Antares de la Luz".
La diligencia, encabezada por el fiscal jefe de Quilpué, Juan Emilio Gatica, tuvo como objetivo determinar la participación de cada uno de los imputados en el hecho.
Tras el fin de procedimiento no se descartó que pueda ordenarse uno nuevo sin la presencia de los seis encausados y en horas de la noche.
Según detalló Gatica al término del trabajo, la diligencia reafirmó lo sostenido por el Ministerio Público respecto a que las seis personas que hoy regresaron hasta el fundo Los Culenes -Natalia Guerra, Carolina Vargas, Josefina López, María del Pilar Alvarez, Pablo Undurraga y David Pastén- en la zona de Colliguay, son los responsables del homicidio caliicado en calidad de autor.
No así en el caso de Karla Franchy y Francisca Ceroni, quienes son imputadas en calidad de cómplice y encubridora.
Recreación
La diligencia comenzó a las 12:00 horas de este miércoles una hora después de la llegada de los imputados al sitio del suceso.
Los individuos fueron trasladados desde Santiago en dos carros de Gendarmería y si bien en un principio la Fiscalía tenía la intención de realiza el procedimiento de manera individual, debido a las altas temperaturas y el estado anímico de los imputados, se decidió dividirlo en dos grupos.
Los primeros en recrear la llegada hasta el sector donde se encontraba la casa de adobe fueron Natalia Guerra, Carolina Vargas y Pablo Undurraga.
Allí, lejos de la prensa, relataron las órdenes que recibieron del fallecido Ramón Castillo tras su llegada desde el Hospital de Reñaca, donde Guerra dio a luz al bebé.
Luego lo hizo el segundo grupo que insistió en que "Antares" estuvo sólo al momento del crimen.
Tras ello, se dirigieron hasta la vivienda y a la hoguera instalada junto al inmueble, donde se concretó el sacrificio.