SANTIAGO.- La municipalidad de Providencia rechazó el Estudio de Impacto al Sistema de Transporte Urbano presentado para la construcción del complejo hospitalario Salvador- Geriátrico, a través de un oficio enviado a la Secretaría Regional Ministerial de Transporte y Telecomunicaciones, informó hoy dicha alcaldía.
Expresó, a través de un comunicado de prensa, que "las observaciones que justifican este rechazo tienen que ver con la gran cantidad de estacionamientos subterráneos incluidos en el proyecto y con que uno de los accesos vehiculares sea por avenida Salvador. Esto último provocaría congestión, afectaría el funcionamiento del transporte público e impactaría negativamente en la calidad de vida de los habitantes del sector y usuarios del hospital".
Agregó que en primera instancia, el proyecto impulsado por el Servicio de Salud Metropolitano Oriente consideraba la construcción de 1.843 estacionamientos subterráneos, los que fueron reducidos a 1.671 tras las primeras observaciones presentadas por la municipalidad.
Sin embargo, para el secretario comunal de Planificación de Providencia, Nicolás Valenzuela, la rebaja es insuficiente porque "el impacto vial que generaría tal cantidad de estacionamientos en esa zona sería enorme y perjudicaría la calidad de vida de los habitantes del sector y de las personas que se atienden en el hospital, quienes en su mayoría son usuarios del transporte público y no automovilistas".
"Es un barrio que ya está congestionado y por lo menos se triplicarían la cantidad de automóviles en la zona", manifestó Valenzuela.
Por otro lado, se critica que el proyecto considere ubicar uno de los accesos a los estacionamientos en avenida Salvador, pues esto causaría tacos en esa importante vía de Providencia, especialmente en la pista derecha, definida para uso exclusivo de los buses del Transantiago.
"Una de nuestras prioridades en materia de movilidad urbana es promover el uso de transporte público y otras formas sustentables que permitan descongestionar y descontaminar la ciudad, sin embargo en las condiciones actuales esta intervención estaría causando un impacto muy negativo en todos estos ámbitos, porque fomenta el uso del automóvil, genera congestión, entorpece varios recorridos del Transantiago y, en definitiva, cambiaría irreversiblemente la vida en el lugar", explicó Nicolás Valenzuela.
Aclaró que la municipalidad apoya la construcción del complejo hospitalario, pues "entendemos que esto viene a resolver una necesidad urgente de todos los usuarios del sistema público de salud en el sector oriente, pero creemos que lo que se haga se debe hacer bien, y ello no puede implicar efectos tan negativos en materia de transporte urbano".
Para la autoridad municipal, la solución pasa por ajustar el proyecto a la capacidad real que tienen las vías para absorber el flujo de automóviles que se creará; en otras palabras, "se debe disminuir drásticamente la cantidad de estacionamientos y pensar en otra vía de acceso que no sea Salvador", aseguró.
En el proceso del Estudio de Impacto al Sistema de Transporte Urbano, que coordina la Seremi de Transporte y Telecomunicaciones, también se consideran las evaluaciones de organismos como la Unidad Operativa de Control de Tránsito, la Sectra y Transantiago, entre otros. Una vez emitidas esas evaluaciones, el organismo público coordinador determina su aceptación o rechazo general, dijo la municipalidad.