Machi Celestino Córdova desde la cárcel: "Me han llevado a juicio sin tener prueba alguna"

SANTIAGO.- El machi Celestino Córdova, quien se encuentra privado de libertad y enfrentando un juicio oral por la muerte del matrimonio Luchsinger-MacKay en enero de 2013, difundió un comunicado público desde la cárcel, en el cual aseguró que se le ha llevado hasta una instancia legal "sin tener prueba alguna".

Esta es la primera vez que se refiere a la situación que pesa en su contra desde que se inició el juicio el lunes 3 de febrero. La veracidad de la carta redactada por el machi fue confirmada a Emol por fuentes cercanas vinculadas a éste, así como también por activistas de la causa indígena.

"Desde que se ha dado inicio al juicio oral en mi contra, se han vulnerado y discriminado profundamente la parte espiritual, moral, cultural y la libertad de expresión de nuestro pueblo mapuche. Por lo que hoy es una gran responsabilidad la del Estado chileno ante los ojos del mundo, por su actitud ofensiva y represiva a través de sus instituciones que históricamente han ido generando la alteración espiritual, individual y colectiva", dijo Córdova.

Y añadió: "En conjunto estar atentos a la pronunciación del poder judicial del Estado chileno, que me ha llevado a juicio sin tener prueba alguna, por lo que la cárcel pasa a ser sólo una amenaza frente a las nuevas generaciones y un gesto de nulo interés y voluntad política, de los actores del Estado para la convivencia armónica".

Córdova culminó detallando que a su pueblo lo han tratando de atemorizar "por el sólo hecho de alzar la voz sin temor alguno por recuperar y defender nuestro territorio y entorno natural".

El juicio en contra del mapuche se inició el pasado lunes. En la instancia -que es encabezada por el magistrado Luis Sarmiento y se extenderá por 20 días- declararán en total más de 100 personas, entre peritos especializados y testigos del hecho.

Córdova arriesga una pena de presidio perpetuo calificado por los cuatro delitos que se le imputan (incendio con resultado de muerte, robo con violencia, incendio de bienes inmuebles y en casa habitación).

La parte querellante, además, aduce que tras el machi existirían otros implicados, los cuales se encuentran prófugos.