Fiscalía confirma que había ordenado libertad de hombre que murió en furgón policial

SANTIAGO.- El fiscal adjunto de Rancagua, Claudio Riobó, confirmó este mediodía que él ordenó la liberación del comerciante Jorge Aravena Retamales, el hombre que murió al interior de un furgón policial, inmediatamente después de que Carabineros le informara que había sido detenido.

El persecutor, que en la tarde del lunes estaba de turno, explicó a Emol que tuvo una conversación telefónica de poco más de tres minutos con los efectivos policiales de la Primera Comisaría de Rancagua y que en ese mismo llamado él impartió la orden.

"El llamado para dar cuenta del hecho fue a las 14:50 horas y en la misma conversación, tras la explicación de los funcionarios de Carabineros de cómo fue detenido, de inmediato uno como fiscal imparte las instrucción a realizar. Y fue en ese mismo llamado, a las 14:53 horas, que se toma la decisión de quede en libertad y a la espera de citación", afirmó.

Riobó explicó que él adoptó la decisión de liberar a Aravena por las circunstancias en que fue detenido, tras el no pago de la cuenta de un restaurant por parte de una segunda persona que huyó del recinto sin cancelar y lo dejó esperando.

"Eran dos los sujetos que habían consumido en el restaurant y uno de ellos se había fugado. Uno puede pensar que quien se fugó era el que había invitado por ejemplo al imputado y él, tal vez, no tendría mayor responsabilidad al ser el invitado. Como son hechos que hay que investigar y debido a la poca 'lesividad' que tiene el ilícito se tomó la decisión", añadió.

El fiscal adjunto enfatizó que luego de los trámites administrativos, los efectivos policiales debieron dejar en libertad a Aravena.

Sin embargo, esto no ocurrió y el hombre estuvo alrededor de seis horas al interior del furgón policial, que estaba estacionado a pleno sol, lo que finalmente provocó su deceso.

El caso derivó ayer en que Carabineros expulsara de la institución a cinco uniformados, incluida la subteniente Maritza Díaz Donoso, que estaba a cargo de la guardia del recinto policial de calle San Martín. Además, se sacó de esa unidad al mayor Nelson Vilches, por su responsabilidad de mando, y por trasparencia con las investigaciones que se están realizando.

La Fiscalía Militar indagará lo ocurrido al interior del cuartel policial, mientras que el ilícito que inició este caso –el no pago de una cuenta en un restaurant- pasará a manos de un segundo fiscal, quien decidirá si continúa o no con la búsqueda del hombre que estaba con Aravena.