SANTIAGO.- El presidente de RN y ex senador por la Región de Los Ríos, Carlos Larraín, reconoció este jueves que a pocos días de dejar la actividad política se va "derrotado" de la mesa directiva de la colectividad, debido a la crisis abierta tras la derrota en las presidenciales y parlamentarias y la posterior renuncia de los fundadores de Amplitud.
En entrevista con Radio Infinita, el legislador fue consultado sobre si sentía como una derrota dejar la dirección del partido con esos antecedentes, a lo cual contestó que "usted da en el clavo" y agregó que "me habría gustado irme con la satisfacción de haber aumentado el número de parlamentarios".
Además, Larraín insistió en sus críticas contra Amplitud, movimiento que a su juicio "nació para debilitar a la coalición y acordar con la Nueva Mayoría el cambio a la Constitución" y respondió a las críticas de la senadora Lily Pérez, quien lo acusó de destruir a la Alianza. "Viniendo de ella me parece casi un piropo", dijo.
En cuanto a la situación que vive hoy RN, específicamente por la lucha para dirigir el partido tras la renuncia de Francisco Chahuán, dijo que la carrera por presidirlo con un solo competidor (Cristián Monckeberg), "no tendrá menos legitimidad".
A la hora del balance, a 50 días de que deje la política, el ex senador destacó también que "en toda mi presidencia lo que más me ha dolido es que se usara el accidente de mi hijo para atacarme a mí", en referencia al hecho protagonizado Martín Larraín en septiembre pasado, cuando atropelló y dio muerte a un hombre.
En este caso, comentó que espera el juicio "con mucha tranquilidad, tenemos buenos abogados… lo pasé muy mal, también mi hijo", concluyó.