Eyzaguirre destacó que se eliminará el lucro en el 93% de la matrícula del país.
El MercurioSANTIAGO.- El ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, defendió el proyecto de ley –firmado ayer por la Presidenta Michelle Bachelet– que termina con el lucro, el copago y la selección en los colegios que reciben subvención del Estado, y afirmó que los cambios apuntan a mejorar la calidad de la educación en el sistema escolar.
"Este debate ya está resuelto en todas las economías más desarrolladas que nosotros, donde hace tiempo que se prohíbe la selección, el copago y el lucro. Por tanto, es falso que estas cosas no estén relacionadas con la calidad. éstas no son todas las cosas que vamos a hacer por calidad, pero obviamente que están relacionadas", afirmó el secretario de Estado en entrevista con radio Cooperativa.
La autoridad despejó algunas de las dudas que han surgido en torno al proyecto de ley, sobre todo con respecto a la eliminación del lucro en los colegios que reciben aportes del estado. En esa línea, garantizó que los directivos de los colegios –muchos de los cuales son a la vez los sostenedores– podrán cobrar un salario justo por su tarea.
Sin embargo, remarcó que "lo que no vamos a permitir es que un inversionista pasivo, que ha puesto un cierto capital, pase una vez al mes a recoger la bolsa para llevarse el dinero a otra parte". "Los colegios estaban siendo tratados como cuando la gente invierte dinero en la bolsa; así como invertir en la bolsa se podía invertir en un colegio, o sea era una actividad comercial como cualquier otra y eso en ninguna parte del mundo existe", remarcó.
El ministro también descartó que los cambios propuestos por el Ejecutivo para eliminar el lucro lleven a la estatización de los colegios particulares subvencionados. Las aprensiones se deben a que una de las fórmulas planteadas en el proyecto contempla que el Estado puede comprar la infraestructura a los sostenedores que deseen recuperar la inversión que realizaron al levantar las instalaciones del establecimiento.
De acuerdo al proyecto de ley, los sostenedores deberán –en un plazo máximo de tres años– pasar a ser corporaciones de derecho privado sin fines de lucro y ya no podrán seguir arrendando la infraestructura del colegio. Si el sostenedor no desea traspasar la infraestructura a la nueva corporación, el gobierno le dará la opción de que la propia fundación, con los excedentes que genere, compre la infraestructura; o bien que la compre directamente el Estado. En este último caso, esa infraestructura pública podrá seguir siendo administrada por el mismo sostenedor –que ahora será una corporación sin fines de lucro–.
El ministro descartó que esta fórmula constituya una estatización. "De qué estatización estamos hablando aquí. Lo que estamos diciendo es que los particulares subvencionados con fines de lucro deben transformarse en una fundación, pero que esa propia fundación les puede comprar el colegio sin que el sostenedor salga del colegio. Si aún así, la fundación no tiene la envergadura para comprar el colegio, lo puede comprar el Estado, pero el sostenedor continuará operando el colegio. De suerte que dónde estará la estatización", remarcó el ministro.
También explicó que, para que la prohibición del lucro en los colegios no sea "letra muerta", el proyecto establece claramente qué pueden y no hacer los sostenedores con la subvención que reciben del Estado y se les exigirá "total transparencia en la rendición de cuentas". Para esos efectos, indicó que contarán con fiscalizadores y con el apoyo del Servicio de Impuestos Internos para evitar que haya "lucro encubierto".
Eyzaguirre insistió en que, en su análisis, "muy pocos colegios van a optar por cambiarse de rubro", y que la mayoría optará por convertirse en corporaciones sin fines de lucro.
El ministro destacó que con este cambio, se eliminará el lucro en el 93% de la matrícula del país, ya que el 7% restante corresponde a los colegios particulares pagados, que no se incluyen en el proyecto. Dijo que "entre los particulares pagados, también hay un porcentaje muy alto que son fundaciones sin fines de lucro". "De tal suerte que el lucro quedará reducido a su más mínima expresión, en solamente algunos ámbitos de los particulares pagados", aseveró.
Test en liceos emblemáticos eran como la PSU
Eyzaguirre también defendió la eliminación de las pruebas de conocimientos en el proceso de admisión de los liceos emblemáticos y sostuvo que éstas, "tal como el Simce y la PSU, no refleja el mérito del niño, sino el capital cultural de la familia". Dijo que por esa razón la mayoría de los alumnos de esos establecimientos pertenecen al cuarto o quinto quintil.
De acuerdo al proyecto del Ejecutivo, ahora esos colegios no podrán aplicar test de ingreso, sino que se les dará la opción de escoger a estudiantes que provengan del 20% de mejor desempeño de su colegio hasta sexto básico. En caso de que los postulantes sean mayores a los cupos, se elegirán por un método aleatorio o sorteo.
Ante la críticas del movimiento estudiantil, que acusa falta de diálogo por parte del ministerio al elaborar las reformas, Eyzaguirre afirmó que en su cartera han estado "completamente abiertos" a dialogar y recordó que en este tiempo se han reunido con más de 35 organizaciones.
También recordó que "nosotros estuvimos esperando largo tiempo a las organizaciones estudiantiles para que fueran a conversar con nosotros, fuimos respetuosos de sus procesos democráticos internos. Pero los que estábamos 'planchando' éramos nosotros".