SANTIAGO.- El senador PPD, Guido Girardi, instó al Ministerio de Salud a acelerar el plazo de entrada en vigencia del reglamento sobre etiquetado de alimentos y no esperar hasta el año 2017 como se anunció, luego de desecharse el elaborado durante el gobierno de Sebastián Piñera.
En esa línea, el legislador respaldó el anuncio sobre modificación del anterior reglamento ya que no cumplía con advertir claramente en la etiqueta sobre el daño de algunos alimentos, pero que también le manifestó a la ministra de Salud, Helia Molina, que podía hacerse durante fines de 2015 previa consulta con actores sociales y científicos.
"La comida chatarra es responsable de los mayores problemas de salud pública que tiene Chile, relacionados con cánceres y problemas cardiovasculares", enfatizó el senador, quien se mostró inquieto por lo prolongado del proceso en contar con un reglamento que advierta a las personas sobre comida con exceso de azúcar y grasa.
Ante ello, Girardi dijo que el nuevo reglamento no debe dejar lugar a dudas sobre la composición de la comida procesada y que debe tener advertencias claras. Además, pidió al Minsal iniciar un diálogo abierto con la ciudadanía, actores sociales y mundo científico con el fin de crear conciencia sobre la importancia de esta materia.
"Este es un reglamento que, a diferencia del realizado por (el ex ministro) Jaime Mañalich, que se hizo a puertas cerradas, sin los expertos, va contar con la participación de las academias científicas, con el INTA, con las organizaciones de consumidores y luego vendrá un proceso de consulta ciudadana en todo el país", detalló Girardi sobre la propuesta realizada a las nuevas autoridades.
En ese sentido, dijo que aspira a tener listo la propuesta del reglamento en septiembre para iniciar el debate y que entre en vigencia a fines de 2015.
El senador también dijo que durante la reunión con la ministra se le plateó que debía realizarse una mayor fiscalización a las farmacias, ya que continúan realizando prácticas ilegales de ventas de medicamentos.
El legislador lo atribuyó a la falta de fiscalizadores, por lo que propondrá endurecer la Ley de Fármacos y entregar la capacidad de fiscalizaciones a los Seremis de Salud.
"El ISP sólo cuenta con cinco fiscalizadores para toda la región Metropolitana", ejemplificó.
Según la denuncia del senador, las farmacias no cuentan con lista de precios y siguen incentivando a los vendedores para que ofrezcan los fármacos más caros.