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Santiago: Miércoles 04 de diciembre del 2024 | Actualizado 00:35
SANTIAGO.- Carabineros realizó un balance de la marcha estudiantil realizada esta mañana por la Educación Pública, convocada por la Confech, Cones y Aces.
El general Alejandro Olivares señaló que participaron en la movilización cerca de 25.000 personas.
En la jornada se registraron 82 detenidos, de los cuales 73 fue por desórdenes simples, seis por porte de elementos incendiarios y bombas molotov, uno por porte de arma blanca, más dos por daños calificados.
Además, informó que dos efectivos policiales resultaron lesionados. Uno fue una pedrada en uno de sus tobillos, mientras que otro recibió el impacto de esquirlas de vidrio en su rostro, tras lo cual fue hospitalizado y se encuentra en observación.
Por otro lado, Olivares indicó que la mayoría de los detenidos fueron menores de edad, fijando esa cifra en un 60%.
"Lamentablemente tuvimos como resultado dos carabineros lesionados: uno por una pedrada en el tobillo y otro que fue alcanzado por esquirlas de vidrio en su rostro y está hospitalizado en observaciones en el Hospital de Carabineros", señaló.
Consultado por el desalojo de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, el Intendente Claudio Orrego aclaró que "ante una solicitud expresa de desalojo del Decano de esa Facultad, se procedió a hacer, lo que se había solicitado, que era desalojar a las personas que de forma ilegal habían ingresado a la Universidad".
"Condenamos los hechos de violencia al final del acto, pero también destacamos la organización pacífica de la marcha, el que hoy día tengamos que lamentar menos destrozos, menos detenidos y claramente menos lesionados que las otras ocasiones", afirmó.
En esa línea, valoró que "los voceros de la Confech, en esta ocasión hayan condenado claramente el uso de la violencia dentro y fuera de la marcha. Me parece que en la medida que todos condenemos la marcha y todos respetemos el derecho a manifestarse de forma pacífica, la sociedad chilena va a avanzar de mejor manera hacia adelante".
La movilización fue autorizada por la Intendencia de Santiago, la que también facultó a los dirigentes para utilizar la calzada sur de la Alameda -desde Plaza Baquedano hasta la calle Echaurren-, pasando frente al Palacio de La Moneda.
La marcha motivó también una serie de desvíos de tránsito en el sector y participaron unos 300 efectivos policiales.
