Ministros en la mira: Expertos desmenuzan el gabinete de Bachelet

SANTIAGO.- "Nos carga que nos pauteen". Fue la respuesta categórica que dio hace más de una semana la Presidenta, Michelle Bachelet, ante los rumores de un cambio de gabinete, luego de los cuestionamientos de la DC a la conducción política del gobierno.

Pero las críticas del ex ministro del Interior Edmundo Pérez Yoma a la gestión del actual titular de Educación, Nicolás Eyzaguirre, junto a la interpelación a la que éste será sometido el próximo 26 de noviembre, reactivaron el debate sobre un ajuste ministerial.

¿Debiera haber un cambio antes de fin de año? Para abordar ésta y otras interrogantes, Emol contactó a tres expertos que desmenuzaron el despeño de los secretarios de Estado en estos ocho meses de gestión, la conducción de las principales reformas, así como las fortalezas y debilidades del gabinete. 

Dura evaluación del gabinete

Para el académico del Instituto de Asuntos Públicos (INAP) de la U. de Chile Robert Funk, el gabinete es "un reflejo del estilo de gestión de la propia Presidenta, pareciera que ella ha optado por darles bastante espacio a los ministros los primeros seis meses, estando relativamente retirada de la primera línea comunicacional". Si bien cree que esto les dio la "oportunidad de posicionarse", también advierte ciertos riesgos relacionados a "la identificación que pueda tener la opinión pública con una determinada reforma cuando ésta va bien o mal", lo cual afectaría a los ministros que promueven dicho cambio. 

Más crudo en su análisis es el profesor de la Facultad de Gobierno de la UDD Gonzalo Müller, quien indica que el diseño del equipo de gobierno "está haciendo agua". A su juicio, "en la debilidad se cruzan dos dimensiones; ministros que no han logrado tomar el control de sus carteras y hacer visible su gestión y otros que han quemado gran parte de su capital político y credibilidad al enfrentar las reformas más importantes".

Asimismo, el académico de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la UDP Mauricio Morales, comenta que aunque al inicio el gabinete político fue "muy activo en términos de reformas institucionales", su problema radica "en la ansiedad de sacar casi todo de una vez, sumado a una compleja reforma educacional y a una reforma tributaria que, más que consensos, generó fuertes conflictos. Además, los bombazos y el alza en la percepción de la delincuencia frenó este espíritu reformista".

Conducción política: Excesivo protagonismo de Peñailillo

Bajo ese contexto, el mismo Morales señala que el problema se presenta desde la conducción política al mando del ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo. Y afirma que éste mostró "una importante capacidad para estar presente en todos los frentes, incluyendo educación. Al contar con el respaldo de Bachelet, ha oficiado como jefe de gabinete en toda la expresión de la palabra. El problema es que quiere absorberlo todo, lo que está dañando al gobierno, al gabinete y a él mismo. Un jefe de gabinete debe organizar funciones y dejar que los otros ministros hagan bien su trabajo". 

Müller, en tanto, considera que hay un "déficit" en esta materia, el cual se ha evidenciado en las polémicas al interior de la Nueva Mayoría. Y si bien destaca que "quien se ve más cercano a la Presidenta es Peñailillo, y esto hace una diferencia respecto del resto del equipo político, lo que uno echa de menos en Peñailillo es su capacidad de articular y mover al resto del gabinete, y tener una articulación con los partidos, creo que ahí está su debilidad".

Funk sostiene además que los problemas de conducción política también responden a las "fallas comunicacionales" al momento de dar a conocer las reformas y a la estrategia del gobierno de usar su mayoría en el Congreso "con una coalición que tampoco es muy homogénea".

Los tres expertos estiman en que frente al protagonismo y cercanía que tiene Peñailillo con Bachelet, los ministros de la Segpres, Ximena Rincón y de la Segegob, Álvaro Elizalde, se ven eclipsados, con un rol mucho más limitado.

Reforma tributaria: Los errores de Arenas

Los académicos ven al titular de Hacienda, Alberto Arenas, como uno de los ministros más debilitados, y a su vez realizan una crítica evaluación de su gestión a pesar de haber logrado la aprobación de la reforma tributaria. "Se notó una falta de habilidades comunicacionales personales del ministro, tanto con la opinión pública como en su comunicación más privada con el sector empresarial (…) eso probablemente le costó un poco y tuvo el efecto que al final el gobierno se vio obligado en una de sus principales reformas a negociar", afirma el profesor del INAP.

En tanto, el académico de la UDD cuestiona que Arenas "no supo leer la reacción de la ciudadanía frente a las reformas", sumado al hecho de que "hoy cuando se habla de la necesidad de la reactivación económica, de la confianza, hace que muchos miren al ministro de Hacienda como quien impide o es un obstáculo para esa reactivación".

Reforma educacional partió "al revés"

El "gobierno partió al revés", es la primera conclusión a la que los tres expertos llegan al momento de hablar de la reforma educacional. "El ministro (Nicolás Eyzaguirre) partió al revés, en primer lugar no partió por la educación pública, sino por la particular subvencionada, segundo error partió con una discusión sobre la gratuidad cuando en realidad la discusión debió haber partido por la calidad. Cuando tú comienzas mal una reforma desde esas dos dimensiones es muy difícil que esto termine bien", explica el académico de la UDP.

Asimismo, el profesor Müller comenta que "esta reforma es rechazada por más del 50% de la ciudadanía y siendo la gran promesa de campaña no ha podido generar adhesión. Ahí uno tiene que mirar al ministro y su gestión, hay algo que el ministro no está haciendo bien, que le impide alcanzar acuerdos políticos, comunicar correctamente. Finalmente no está cumpliendo para lo que fue llamado como ministro que era sacar adelante esta reforma".

Los ministros más empoderados

Tanto Morales como Funk coinciden en que el ministro Peñailillo es el más empoderado de todos. En palabras de este último experto, su fortaleza está en "un buen manejo político interno, es decir, dentro de las cuatro cuadras del Barrio Cívico, y que se maneja bien en relación a los otros ministros, y los temas, pero esa situación no se cuán sostenible es".

Ambos también destacan al canciller Heraldo Muñoz, quien según Morales lo ha hecho "muy bien" considerando los conflictos que hay con Bolivia y Perú, siendo uno de los más conocidos y mejor evaluados por las encuestas. "Eso no es porque sea carismático sino que las relaciones internacionales son sistemáticamente áreas de buena evaluación", sentencia. Buen desempeño en el cual también mencionan al titular de Defensa, Jorge Burgos.

Las carteras más débiles

Como se mencionó antes, el ministro Arenas es considerado como uno de los más débiles en estos momentos. Pero para estos dos profesores su remoción es difícil, ya que sería el primer titular de Hacienda en salir por problemas de rendimiento. Lo sigue Eyzaguirre que, a su juicio, no ha logrado cumplir con las expectativas que se tenían de él.

Por su parte, Funk apunta a los problemas de manejo en el Ministerio de Salud a cargo de Helia Molina y al titular de Obras Públicas, Alberto Undurraga. Y aunque su par de la UDP hace una buena evaluación de éste último, los dos reconocen que el ser involucrado con la arista política del caso Penta lo ha afectado. Entre aquellas carteras que no han pasado sin pena ni gloria mencionan Desarrollo Social, Sernam y Deportes.

Los tres expertos concuerdan en que más allá del cambio de uno u otro ministro, las alternativas pasarían por un giro en su estrategia política y comunicacional, lo que para algunos se podría traducir en un cambio de rumbo del gobierno.