SANTIAGO.- Tras conocerse que la alcaldesa de Providencia, Josefa Errázuriz, faciitó el Palacio Falabella para celebrar el matrimonio civil de su sobrino, la Contraloría interna de la comuna aclaró que no otorgó permiso para llevar a cabo la ceremonia, como lo había dicho la jefa edilicia.
De acuerdo a El Mercurio, el contralor municipal Guillermo Risopatrón respondió un correo electrónico enviado por el concejal Rodrigo García Márquez (independiente), quien le pedía aclarar los dichos de la alcaldesa, quien aseguró que "yo solicité el permiso a la Contraloría municipal y fue obtenido (...). Fueron dos horas y media donde solo se usó mi oficina y el tercer piso".
En la carta de respuesta, Risopatrón recalcó que "en el contexto de una conversación informal, la Sra. alcaldesa consultó al suscrito la posibilidad de utilizar los salones de la Sede Consistorial para efectos de realizar una reunión familiar privada (matrimonio civil), a lo cual respondí que ello no era posible (...). Sin embargo, le mencioné, ante una nueva consulta, que podría eventualmente, ocupar su oficina privada, después de la jornada laboral, ya que en mi opinión, la oficina constituye un lugar privado (...). Finalmente, no tuve conocimiento si el evento se llevó a cabo".
"A esta dirección no le corresponde autorizar el uso de dependencias municipales, por no estar comprendido en sus funciones. Por lo tanto, no hubo autorización escrita de parte de la Dirección de Control Municipal", agregó el contralor.
Consultada por la respuesta del contralor, Josefa Errázuriz insistió que obtuvo la autorización de Risopatrón para celebrar el amtrimonio de su sobrino, aunque nuevamente pidió perdón "si es que esto fue visto como un abuso de poder".