La votación fue seguida esta tarde por autoridades de Gobierno.
El MercurioSANTIAGO.- Pese a que el fantasma de la Comisión Mixta estuvo presente en todo el debate, finalmente los diputados de la Nueva Mayoría respaldaron en bloque el proyecto de ley del Gobierno que elimina el lucro, el copago y la selección en los colegios que reciben subvención del Estado, permitiendo que éste hoy fuera despachado, luego de ocho meses de tramitación.
De esta forma, se evitó que la iniciativa pasara a una Comisión Mixta, lo que habría dilatado su tramitación, y se cumplió el plazo establecido por el Ejecutivo para despachar el proyecto en el mes de enero.
Tras debatir durante tres horas, los parlamentarios finalmente mostraron su asentimiento a las modificaciones que introdujo el Senado al emblemático proyecto, que ahora debe volver al Ejecutivo para ser promulgado como ley de la República.
Los legisladores votaron artículo por artículo la propuesta gubernamental a partir de las 19:30 horas luego de un intenso y prolongado debate que se desarrolló durante la jornada.
Entre los puntos más discutidos, el fin de la selección en los colegios "emblemáticos" fue aprobado con 69 votos a favor.
Durante la parte final de la sesión, la testera ordenó el desalojo parcial de las tribunas luego de protestas protagonizadas por apoderados agrupados en la Confederación de Padres y Apoderados de Colegios Particulares Subvencionados (Confepa).
La decisión generó rechazo entre legisladores opositores, quienes interrumpieron en varios momentos el proceso de votación del articulado para protestar contra la medida. El diputado José Manuel Edwards acusó a la presidencia de la Cámara por "no dar garantías" al ordenar el desalojo de los apoderados opuestos al proyecto y afirmó que su bancada pedirá la censura de la mesa directiva.
"Esta es la aplanadora final contra los apoderados", señaló el legislador.
Varios parlamentarios de la Alianza se retiraron de la sala mientras continuaba la aprobación, lo que generó duras críticas de diputados oficialistas.
"Nuestros colegas son bastante malos perdedores", fustigó Mario Venegas (DC), actual presidente de la comisión de Educación. "Esto habla muy mal de su respeto a la vocación democrática".
Cambios a propuesta original
Durante el día, los ministros del Interior, Rodrigo Peñailillo, y de Educación, Nicolás Eyzaguirre, mantuvieron una intensa jornada de contactos con parlamentarios del oficialismo con el objetivo de alinearlos en el objetivo de conseguir hoy la luz verde definitiva para que la propuesta se convirtiera en ley.
Entre los principales cambios que había introducido el Senado al proyecto de ley se contaron la restricción de la selección sólo al 30% de la matrícula en los liceos emblemáticos; permitir, en algunos casos, los arriendos de colegios; eliminar la norma que prohibía aplicar pruebas de selección en los colegios particulares pagados; y un régimen de transición especial para terminar con el lucro en los colegios pequeños.
Junto a esto, se incluyeron sanciones administrativas, civiles y penales a los sostenedores que lucren; y se aprobó un fondo de 250 mil millones de pesos para fortalecer la educación pública.
La sesión especial de este lunes se inició con la exposición del presidente de la Comisión de Educación de la Cámara, diputado Mario Venegas (DC), quien dio cuenta de las modificaciones de la Cámara Alta y recomendó a la sala aprobar la iniciativa.
Tras esto, se inició un extenso debate, que se prolongó por cerca de tres horas, donde los diputados de las distintas bancadas expusieron sus argumentos a favor y en contra de la iniciativa.
Una de las intervenciones más encendidas la protagonizó la diputada María José Hoffmann (UDI), quien advirtió al oficialismo que "ya sea en este Gobierno o en el próximo, vamos a cambiar esta mala reforma". "Si hoy nos faltan los votos, en la próxima elección los tendremos", afirmó, y vaticinó que "esta reforma va a ser un fracaso" y que "será la razón de por qué volverán a perder el Gobierno".
Edwards (RN), en tanto, sostuvo que "más que una reforma, es un experimento social" y aseguró que la reforma "ahogará a los colegios particulares" y "tendrá una AK-47 apuntando contantemente a los sostenedores".
Por su parte, los diputados de la Nueva Mayoría acusaron una "campaña del terror" sin precedentes de parte de la derecha, a la que responsabilizaron de oponerse constantemente a las grandes transformaciones en el país. "Este proyecto le va a cambiar la vida a nuestros compatriotas y estoy seguro que al término de nuestro Gobierno, cuando los apoderados estén palpando en carne propia que la reforma está llegando a sus hogares, van a respaldarla", afirmó Fidel Espinoza (PS).