SANTIAGO.- Un grupo de sacerdotes y diáconos de Osorno enviaron una carta al nuncio apostólico en Chile, Ivo Scapolo, solicitándole que interfiera para lograr la renuncia del recién nombrado obispo de la ciudad, Juan Barros Madrid, sindicado como encubridor del padre Fernando Karadima, condenado por la Iglesia por abusos sexuales.
En la misiva, publicada por SoyChile.cl, los religiosos hacen alusión a una primera carta enviada por el sacerdote Peter Kliegel, en la cual explicaba sus reparos al nombramiento de Barros la cual, reclaman, nunca tuvo respuesta.
En esta nueva carta, los cerca de 30 firmantes señalan que "no podemos sino decirle que un sinnúmero de fieles, sacerdotes y diáconos sufrimos en este momento mucha tribulación, pues no nos sentimos acogidos, menos comprendidos por la jerarquía de nuestra Iglesia".
En este sentido, aseguraron que "seguimos confundidos e irritados desde el momento del comunicado del nombramiento del Sr. Obispo Juan de la Cruz Barros Madrid como obispo para Osorno".
Si bien los autores de la carta indicaron que "no nos corresponde meternos en la vida personal" de alguien, aseguraron que tienen "el anhelo y legítimo derecho que nos pastoree un obispo íntegro, testigo de la verdad, con principios morales impecables" tal como era, según indicaron, el primer obispo de la ciudad, Francisco Valdés Subercaseaux.
"El apóstol Pablo recuerda a Timoteo que 'el obispo ha de ser intachable' y a los Corintios advierte que ningún cristiano debe ser éscándalo a la Iglesia de Dios´, menos una autoridad episcopal. Consideramos que la autoridad que pastoreará a nuestra diócesis se caracterice ante todo por una virtud: la credibilidad. No nos es posible una mirada diferente, la fe no nos lo permite", agregan.
Es por eso que los religiosos plantean que "por todo lo que se ha publicado referente al Sr. Obispo elegido, que no es desmentido por la iglesia en forma enérgica, convincente y pública, solicitamos a usted, Sr. Nuncio Apostólico, que procure la renuncia del Sr. Obispo Barros como obispo para Osorno".
Así, señalan que el nombramiento del religioso "no sólo nos ha desconcertado y desilusionado, sino causó un quiebre en nuestra unión eclesial Esta es la mayor preocupación".
"Sr. Nuncio, ayúdenos a no perder la fe en nuestras autoridades eclesiales", cierra la misiva.