Ministra de Salud y despenalización del aborto: "Es una decisión de la mujer"

SANTIAGO.- "Muchas veces se habla del aborto como una obligación. Es una decisión de la mujer y eso es algo que hay respetar. No podemos obligar a nadie a hacerse un aborto que no quiere".

Esas fueron las primeras palabras que entregó hoy la ministra de Salud, Carmen Castillo, en el marco de las prioridades que impulsa la cartera para este año y las polémicas en torno al proyecto de ley para despenalizar la interrupción del embarazo en tres causales: inviabilidad fetal, riesgo de la madre y violación.

A un mes de haber sido designada como titular del Minsal, Castillo dijo que "uno puede tener muchas opiniones personales, pero yo tengo que representar al ministerio" y afirmó que si bien la postura del hombre en el tema en "algo puede aportar", la decisión no se puede considerar "sin ese sentimiento femenino", por lo que aseguró que buscaran sensibilizar a los parlamentarios (hombres) en el tema.

En esa línea, comentó que "en la prensa han salido muchos casos personales que nosotros respetamos absolutamente. Uno no puede ir en contra de una decisión, pero esa decisión tiene que ser bien informada. Que sepan las personas. Las tres causales tienes que ser conocidas, pero también el respeto a la mujer".

Por ello, aclaró que "nadie va a tomar ninguna presión sobre esa niña, especialmente porque hay condiciones legales de por medio", refiriéndose a la situación de aborto en menores de 14 años embarazadas por violación, que contarán con el apoyo de un representante legal.

"Acá hay un proyecto de ley para todo el país, una política pública de la cual nosotros nos tenemos que hacer cargo y este análisis tiene que ser trabajado. Todos son parte de la sociedad, en el fondo, más que gobierno, es la sociedad la que tiene que tomar la decisión", afirmó.

Objeción de conciencia

El 31 de enero cuando la presidenta Michelle Bachelet presentó el proyecto sostuvo que por tratarse de situaciones extremas y estar en juego las convicciones de las personas, serán los médicos quienes podrán hacer "objeción de conciencia" y no tratar a la paciente afectada.

Tras ello, el primero en salir al paso fue el rector de la Universidad Catolica, Ignacio Sánchez, quien afirmó que "no hay ninguna ley que nos obligará a nosotros a contratar personas que realicen abortos en nuestra institución".

Al respecto, Castillo dijo que la ley contempla "la objeción de conciencia individual, hasta ahora. Veremos cómo sigue el trabajo en el debate en el Congreso", abriéndose a la posibilidad a considerar una objeción de conciencia institucional.

"Habría que discutirlo. Hay que convérsalo con un poco más de altura de miras. Si llega una mujer con problema de vida no podrán decir no, es que yo no puedo intervenir", puntualizó.

"Esperamos que no haya situaciones (…) también está el criterio médico, hay que aplicar una conciencia total de cómo vamos a trabajarlo. Esto no es tomar decisiones voluntariosas, es un tema de decisión informada, con protocolos muy estrictos, con claridad y respaldo técnico para no hacer más de lo que nosotros estamos proponiendo", sentenció.