SANTIAGO.- El senador de la DC, Patricio Walker, se convirtió esta tarde en el nuevo presidente del Senado, luego de ser elegido por 23 votos contra 13 a favor de Jacqueline Van Rysselberghe (UDI), ocasión en la cual reafirmó su compromiso con el impulso de una agenda anticorrupción durante su mandato.
En la ocasión, el legislador, quien se convirtió en el político más joven en asumir la testera de la Cámara Alta con 45 años, sostuvo que "este es el momento para revisar y endurecer la tipificación penal de aquellas conductas que permiten el abuso de poder, tales como el tráfico de influencias, el uso de información privilegiada y la colusión".
"Sabemos que los ciudadanos están molestos con la política y tenemos que hacernos cargo de esa realidad. Sin embargo, no debemos olvidar jamás, que sin partidos, gobiernan los caudillos, y sin parlamento, gobiernan los dictadores", recordó, en relación a la crisis que ha provocado en el sistema los casos Penta y Caval.
Por ello, durante su discurso de asunción al cargo, Walker recalcó que "el desafío que debemos enfrentar es darle al país una gobernabilidad democrática, en paz, justicia y cohesión social. Los problemas de la política, se enfrentan, con una mejor política. Los problemas de la democracia, los enfrentamos con más y mejor democracia".
En ese contexto, indicó que "en los próximos días, voy a proponer a los comités parlamentarios, un calendario de trabajo con plazos acotados, para la aprobación de los proyectos de ley sobre probidad y transparencia que se encuentran radicados en las comisiones del Senado".
"Estoy seguro -agregó- que vamos a contar con el apoyo transversal de todos senadores para hacer los cambios legislativos que el país exige y reclama", aseveró, junto con recalcar que dicha agenda de probidad y transparencia se concretará "sin conexión alguna con los procesos que se llevan adelante o que se pueden presentar en el futuro".
Además, reconoció que asumirá el cargo "en un momento en que la política y las instituciones públicas están expuestas a una creciente desconfianza de la ciudadanía, por lo que debemos reaccionar de manera decidida y proactiva, comenzando por exigir mucho más de nuestra propia forma de construir y hacer política".
Walker recordó asimismo que "este año debemos aprobar, luego de un debate serio, transparente y de cara a la ciudadanía, una nueva ley de financiamiento de las campañas electorales y de la actividad política, asegurando que todo ingreso que reciban los partidos y candidatos tengan un origen conocido, publicando su fuente, y limitando el tope del gasto".
En relación a las atribuciones del Servicio Electoral, senador Patricio Walker indicó que "es clave dotarlo de autonomía con rango constitucional, de más personal, recursos, atribuciones y herramientas eficaces para fiscalizar el uso de los recursos en las campañas políticas y la rendición de los mismos".
El legislador se refirió también a la idea de establecer sanciones a los parlamentarios que violen la legislación electoral, asegurando que "debemos avanzar en establecer como sanción la pérdida del escaño y la prohibición de postular a cargos de elección popular, tal como lo propusimos en una moción junto a otros senadores".
"Queremos establecer sanciones drásticas que ayuden a erradicar de la política aquellas prácticas que sólo contribuyen a alejar a la ciudadanía de lo público", dijo.
El Presidente del Senado señaló también que "es urgente aprobar, entre otras iniciativas, el proyecto de ley sobre probidad en la función pública que perfecciona y extiende las declaraciones de patrimonio e intereses a un mayor número de autoridades y las regula de un modo más estricto".