Poca gente llegó a la misa de Domingo de Ramos realizada por el obispo Barros.
APSANTIAGO.- La primera misa de monseñor Juan Barros, desde que se convirtió en la máxima autoridad de la diócesis de Osorno, estuvo marcada por la baja asistencia de feligreses.
Según informa el portal SoyOsorno, sólo 150 personas llegaron a la catedral de la ciudad -que puede albergar a más de 800- a eso de las 11 de la mañana, para participar de la liturgia de Domingo de Ramos.
La ausencia de feligreses llama la atención, considerando que la catedral de Osorno estuvo repleta en la misa de Domingo de Ramos de 2014, celebrada por el párroco Bernardo Werth.
A raíz de la molestia que generó el nombramiento del obispo Barros, que originó fuertes protestas, un contingente policial uniformado y de civil se presentó en el recinto como medida preventiva.
Cabe recordar que el sacerdote es acusado por los denunciantes del sacerdote Fernando Karadima de haber presenciado y encubierto sus abusos.