"Es grave que el Gobierno de Bachelet haya hecho campaña con un slogan de gratuidad y no cumpla lo que prometió", sostuvo el presidente de la FEUC.
El MercurioSANTIAGO.- Un rotundo rechazo a la idea de que la gratuidad en la educación superior sea financiada a través de un "impuesto al graduado" expresaron los máximos dirigentes universitarios.
Según trascendió por la prensa, el Ministerio de Educación estudia la posibilidad de que quienes ingresen a la educación superior estudien gratis y luego, cuando trabajen, devuelvan parte de ese monto a través de un impuesto.
Entre las opciones que se analizan, se cuenta que el impuesto sólo se aplique por un período determinado –no por el total del monto– y que afecte a los profesionales con mayores sueldos.
Esa fórmula es rechazada de plano por los principales voceros de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), que sostienen que ésa no es la gratuidad que prometió el Gobierno y que, en la práctica, seguiría operando como los actuales créditos universitarios que los estudiantes deben costear.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la U. Católica (FEUC), Ricardo Sande, sostuvo que "es muy fácil ponerle el nombre de gratuidad a algo que en la práctica no lo es" y recordó que "lo que todos entendimos es que la reforma tributaria iba a ser justamente para financiar esta medida".
A su juicio, la idea del impuesto al graduado "no tiene ningún sentido y se parece mucho al Crédito con Aval del Estado, que existe actualmente". "Por qué no nos quedamos mejor con el Crédito con Aval del Estado, que es bastante parecido y requeriría menos gasto y menos burocracia estatal", cuestionó.
Sande –quien, a diferencia de la Confech, no es partidario de la gratuidad universal– reprochó que "el Gobierno de Bachelet haya hecho campaña con un slogan de gratuidad y que en la práctica utilice la letra chica para no cumplir lo que prometió".
"Yo creo que esto no es lo que se prometió, independiente de si estoy a favor o en contra de esta media. Pero prometer una cosa y, en la práctica, hacer otra es un engaño", subrayó.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Valentina Saavedra, también criticó que "más que gratuidad, esto es una deuda a largo plazo" y cuestionó que el Gobierno "siga viendo la educación no como un derecho que garantiza el Estado, sino como una cuestión que tienen que financiar los estudiantes".
"Acá no hay gratuidad. Quizás no va a ser un crédito directamente con el banco, pero sí es adquirir una deuda y, más allá del mecanismo con el que uno pague esa deuda, finalmente es un crédito a largo plazo", remarcó.
En su opinión, lo que se ve acá es un intento por "mantener el mismo sistema, pero con mecanismos un poco más amables", cuando "lo que se necesita es una educación gratuita de verdad".
La dirigenta universitaria cuestionó además la "falta de claridad" del Gobierno sobre el proyecto de educación superior –que se enviaría en el segundo semestre de este año– y demandó más participación de los actores sociales en la elaboración de la iniciativa. "Han tenido un año para discutir y aún no hay un proyecto claro", sostuvo.
También criticó que la semana pasada, cuando se reunieron con el Mineduc, ni siquiera se mencionó la alternativa de cobrar este impuesto. "Entonces, o no existía o esperaban lanzarlo después por la prensa", cuestionó, afirmando que "no tiene ningún sentido tener diálogo si luego uno se entera por terceros de los avances y no se plantean de frente".
Saavedra sostuvo que estos últimos hechos refuerzan que es necesario seguir movilizándose. De hecho, los estudiantes ya anunciaron una manifestación para el jueves 16 de abril.