RANCAGUA.- Escoltada por 5 funcionarios de Carabineros, a las 18:15 horas de este miércoles, la nuera de la Presidenta Michelle Bachelet, Natalia Compagnon, abandonó las dependencias de la Fiscalía Regional de Rancagua tras comparecer en calidad de imputada y prestar declaraciones por nueve horas.
Ello en el marco de la investigación que lleva adelante el fiscal regional, Luis Toledo, por presunto delitos de negociación incompatible y tráfico de influencias que se persiguen en el denominado caso Caval.
Durante su salida de la fiscalía, Compagnon, quien es dueña del 50 % de la empresa, que compró los cuestionados terrenos de Machalí, fue agredida con banderas que portaban algunos de los manifestantes, que desde esta mañana protestaban en el lugar.
Compagnon, casada con Sebastián Dávalos, se retiró sin hacer declaraciones al igual que su abogada, Jessica Norambuena, quien asumió su defensa tras conocerse la entrega de un crédito de 6 mil 500 millones de pesos, a su compañía que contaba con un capital inicial de sólo 6 millones de pesos.
La diligencia en cuestión estuvo encabezada por los fiscales Toledo y Sergio Moya, quienes además habían citado para hoy a Dávalos, el cual se excusó por motivos de agenda de su abogado Ávaro Morales.
Ayer, en tanto, compareció a la Fiscalía el demandante de Caval, Sergio Bustos, quien exige en tribunales laborales el pago de $200 millones por las gestiones que -según él- realizó para materializar la compra de los terrenos en Machalí, principalmente para conseguir el financiamiento.
De acuerdo a sus argumentos, fue él quien gestionó con el Banco de Chile las reuniones para obtener el cuestionado crédito que finalmente Caval recibió por $6.500 millones para la compra de los fundos que se valorizarían con el cambio del plan regulador. Caval terminó vendiendo los paños de Machalí en $9.500 millones.