SANTIAGO.- "Poniendo políticos antes que la familia; Michelle Bachelet, Keiko Fujimori y los pecados de sus parientes" es el título del artículo que publicó este viernes el diario "The Economist", en el cual compara el problema familiar de la Mandataria por el caso Caval con la situación de la hija del ex jefe de Estado peruano.
La nota, que fue publicada en la edición web del periodico y que mañana aparecerá en papel, describe cómo el negocio realizado por su nuera, Natalia Compagnon, ha dañado la imagen de la Gobernante, destacando que el nepotismo es "un vicio político característico" de Latinoamérica.
Pese a que destacan que la ley se mantiene "mejor que en otros lugares" de la región, la columna advierte que los hechos han mostrado que "en el Chile de Bachelet algunos son más iguales que otros", pese a que combatir la desigualdad ha sido una de sus principales banderas.
"The Economist" criticó además que Bachelet "tardó en reaccionar" ante la noticia de Caval y que al referirse al tema "como madre y presidente" cometió un error al imponer su primer rol respecto del segundo. "Ella debió condenar entonces los actos de su hijo", dicen.
En cuanto a la comparación con Fujimori, establecen que pese a que ambas tienen "poco en común", hay un hecho que las une, ya que la líder peruana "también tiene un problema familiar", recordando que cuando postuló a la presidencia y perdió por estrecho margen "muchos asumieron que buscaba perdonar" a su padre (Alberto), quien "cumple sentencias de cárcel por abusos a los derechos humanos y corrupción".
Asimismo, el texto destaca que Fujimori lidera las encuestas para las próximas elecciones y que ha fortalecido a su partido, pero su problema es que su padre es "aborrecido" tras su paso por Palacio Pizarro.
En ese sentido, subrayan que Keiko se ha cuidado "de no precisar si perdonaría o no al Sr. Fujimori", más allá de señalar si cometió errores o no, como lo ha hecho en el pasado.
Finalmente, el diario advierte que si Fujimori quiere ganar las elecciones "deberá ser más implacable en poner la política antes que la familia" y concluye que si "Bachelet quiere salvar su empantanada presidencia, deberá mostrar una voluntad semejante, actuando como madre de la nación más que como madre del Sr. Dávalos".