Eduardo Rodíguez Veltzé, agente de Bolivia en La Haya.
El MercurioSANTIAGO.- Una larga carrera pública en su país exhibe el agente de Bolivia ante el tribunal de La Haya, Eduardo Rodríguez Veltzé, quien desde este lunes se encontrará frente a frente con su par chileno, Felipe Bulnes, en el inicio de los alegatos ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El abogado, quien tiene 59 años de edad y con antepasados provenientes de Austria, se formó en la Universidad Mayor de San Simón, en Cochabamba, y luego estudió en la universidad de Harvard (EE.UU.), al igual que el representante de La Moneda.
Rodríguez Beltzé ejerció subcontralor de la República entre 1994 y 1999 y luego presidió la Corte Suprema de Justicia.
Cuando se desencadenó la grave crisis política que sacudió a Bolivia a principios de la década, debió asumir como Presidente interino de su país por mandato de la Constitución, durante seis meses, en reemplazo del renunciado Mandatario Carlos Mesa. Coincidentemente, el segundo se desempeña hoy como portavoz internacional de la demanda marítima.
Durante su breve período, el jurista enfrentó una dura oposición que intentó frenar las elecciones de diciembre de 2005. En ellas resultó electo el actual Mandatario, Evo Morales, quien acaba de iniciar su tercer mandato.
En su administración al frente de la nación, Rodríguez Veltzé sostuvo líneas de diálogo muy activas con Chile y Perú, con la perspectiva de incrementar la integración entre los tres países.
De esa época también se recuerda su voluntad de mantener a La Paz al margen mientras Lima iniciaba los movimientos que llevaron a la presentación peruana ante la Corte Internacional por el diferendo marítimo, que concluyó en enero de 2014.
Durante su permanencia en el Palacio Quemado -la sede del Ejecutivo en La Paz- se reunió seis veces con su par chileno Ricardo Lagos, a quien "respeta y admira", según confidenció hace algunos años.
En ese tiempo, Bolivia y Chile comenzaron a "tender puentes" con acercamientos que incluyeron el acuerdo que eliminó el requisito del pasaporte para la circulación de ciudadanos entre ambos países y un entendimiento para reducir asimetrías comerciales a merced del Acuerdo de Complementación Económica ACE-22.
Es considerado como una persona en la que predomina una mirada pragmática y técnica, y él mismo se ha definido como alguien "alejado de las trincheras políticas" y que no está inserto en la lógica de "búsqueda del poder".
Opción por "diálogo transparente"
Durante la primera administración de Michelle Bachelet, Rodríguez Veltzé jugó desde su país un rol importante en la dirección de mantener cierta estabilidad en las relaciones bilaterales, en momentos en los que estaba sobre la mesa el tema del gas boliviano.
Junto al ex canciller de su país Armando Loayza -quien hoy integra el equipo asesor de Evo Morales- logró persuadir al Presidente boliviano para que optara entonces por un diálogo transparente con Chile.
Se enfrentó así a la postura que promovía el Vicepresidente, Álvaro García Linera, quien prefería la estrategia sustentada en la consigna de "ni una molécula de gas para Chile".
La postura más dialogaante fue continuada, con altibajos, por el actual ministro de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca.
Más tarde, de vuelta en la academia como decano de la Facutad de Derecho de la prestigiosa Universidad Católica de Bolivia, abogó por conseguir "soluciones posibles y pacíficas" entre ambos países, "lejos de la confrontación y donde podamos ganar todos". Pocos años después, Rodríguez Veltzé cumple precisamente un rol crucial para intentar plasmar en la realidad los principios que planteaba desde su despacho académico.