ROMA.- A dos días de sostener una reunión bilateral con el Papa Francisco, la Presidenta Michelle Bachelet manifestó su confianza en que el Estado Vaticano no se involucrará en la demanda marítima de Bolivia y aclaró una vez más que la visita que el Santo Padre realizará a La Paz en julio proximo será sólo de carácter "pastoral".
En una entrevista que otorgó a la revista "Encuentro", la cual se distribuirá el viernes en las estaciones de Metro y en todas las parroquias de Santiago, la Mandataria se refirió al posible uso político que pueda hacer el Gobierno boliviano de la visita del Pontífice y recalcó que "el Papa hará una visita pastoral a Bolivia, tal como la que hará a Chile, y en eso ha sido bien claro".
En ese contexto, Bachelet subrayó que "no creo que el Estado Vaticano quiera involucrarse en un problema bilateral y confío en lo que el Papa ha manifestado en este sentido. Otras veces, cuando se le ha preguntado por diferencias entre dos países él siempre ha estado a favor de la unión de los pueblos y esa es también nuestra postura como país".
En cuanto a los temas que espera abordar en la cita con Francisco, la cual se realizará el próximo viernes a partir de las 10:30 horas locales (05:30 horas de Chile), la Jefa de Estado dijo que "espero poder hablar con él de temas que sean de interés común entre la Iglesia Católica y Chile, y por supuesto de la realidad latinoamericana que él tan bien conoce".
Consultada sobre su percepciom sobre el líder de la Iglesia Católica, la Gobernante indicó que "el Papa es un líder espiritual muy importante, no sólo para muchos de mis compatriotas, sino para esta época de cambios que vive el mundo. Su renovadora mirada sobre la justicia social y sobre el diálogo es un aporte para todos".
"Por eso voy muy contenta, porque él es una persona muy llana y optimista; pero voy también entusiasmada porque sé que será una conversación profunda, porque conoce muy bien la realidad de los países de la región. Quiero también contarle del proceso de reformas que hemos emprendido en Chile, porque sé que él está muy interesado en todo lo que promueva la justicia y la igualdad", añadió.
Finalmente, la Presidenta destaca que el hecho de que el Papa sea latinoamericano "le da una impronta especial, porque representa la realidad de los países que luchan por alcanzar el desarrollo y conoce los obstáculos que se deben enfrentar para ello".
"Es también conocida la importancia que él le da a estar cerca de la gente sencilla, por escucharlos y acompañarlos. Y usa un lenguaje directo, sin rodeos, usa el lenguaje de la vida cotidiana. Creo, por eso, que él encarna un tipo de liderazgo muy novedoso, centrado en la relación con las personas y con sus vidas cotidianas", concluyó.