SUJPUR.- Fotos digitales, correo electrónico y teléfono por satélite permiten a los cirujanos de la Cruz Roja japonesa precisar sus diagnósticos en el hospital de campaña que instalaron en Sujpur, un poblado indio arrasado por el sismo del 26 de enero.
A unos metros de su mesa de operaciones, la foto de un pie abierto en todo su ancho aparecía en la pantalla de un ordenador portátil. Al lado, una cámara de vídeo numérica iba grabando los detalles de las tres intervenciones de ese día.
En el exterior de la tienda montada sobre una estructura inflable, perdida en medio de un paisaje semidesértico, una antena enviaba las señales hacia un satélite y un grupo electrógeno que proporcionaba la energía eléctrica para todo el conjunto.
"Los médicos son cada vez más especializados", explicó el doctor Nobuyuki Sagehashi, un cirujano plástico, y "tenemos que elegir entre diversas opciones". Pedir la opinión de un especialista que conozca lo mejor posible el caso clínico resulta entonces de gran utilidad. Para este efecto, los médicos de Sujpur envían a Japón por correo electrónico una foto de la herida o de la fractura que debe ser atendida.
A miles de kilómetros, en Kumasoto (isla de Kyushu), otros médicos estudian la fotografía recibida en un ordenador. El contacto es establecido luego mediante teléfono vía satélite con la sala de operaciones de Sujpur. Los especialistas en Japón pueden pedir entonces elementos complementarios, por ejemplo, cómo y cuando se produjo la herida, su gravedad, etc.
"Decidimos entonces la conducta que debe adoptarse, pues los consejos recibidos ayudan a practicar la operación", explicó. "Tenemos un neurocirujano, un especialista cardiovascular, pero no contamos con un cirujano ortopedista", explicó Mihoko Goto, portavoz del equipo de 18 personas, entre los cuales hay tres cirujanos y cuatro enfermeras. El cirujano ortopedista puede permanecer en Japón y desde allí dar consejos, precisó.
Lo mismo ocurre con intervenciones de gran precisión como en los ojos, las manos, o en el caso de injertos. Los poblados en los alrededores de Sujpur fueron arrasados por el terremoto y los sobrevivientes presentan a menudo grandes heridas expuestas en el cráneo, muchas veces infectadas, y miembros fracturados.
En la impecable sala de operaciones de los japoneses, los pacientes no se extrañan al ser fotografiados o filmados. El dispositivo es impresionante: la Cruz Roja envió desde Noruega lo que se llama en la jerga médica una "unidad de respuesta urgente (ERU). Se trata de un verdadero hospital autónomo, preparado previa y completamente para catástrofes como el terremoto en el Estado de Gujarat.
Los equipos médicos, como el de la Cruz Roja japonesa, encuentran todo ya preparado: camas, tenidas de operación, grupo electrógeno, medicamentos, raciones alimenticias e incluso material para desinfectar el agua.