BRUSELAS.- La Unión Europea cuenta ya casi con el mismo número de internautas que EEUU, pero el uso que los europeos hacen de Internet es sobre todo "pasivo", según un informe adoptado esta semana por la Comisión de la UE.
El informe, que evalúa el impacto de la iniciativa comunitaria conocida como "e-Europa", confirma que la tasa de penetración de Internet está creciendo muy rápidamente: el número de hogares europeos conectados a la red aumentó un 55% entre marzo y octubre de 2000.
Según la Comisión, este crecimiento se explica por el descenso de los precios de conexión, que han bajado un 23% de media a lo largo de ese período y hasta un 47% en algunos países, gracias a la liberalización del mercado.
En las escuelas, el aumento del uso de Internet ha sido incluso más rápido: un 80% están ya conectadas a la red para fines pedagógicos.
El documento de la Comisión sobre la Europa digital prueba que en el año 2000 "se produjo un verdadero avance de Internet en Europa", aunque "no debemos conformarnos, si queremos alcanzar todos sus beneficios económicos", según declaró el comisario europeo encargado de la sociedad de la información, Erkki Liikanen.
En Europa, el uso de la red es sobre todo "pasivo", es decir, se centra en la búsqueda y descarga de información, y deja sin explotar la mayor parte del potencial interactivo de la red, especialmente en términos de comercio electrónico.
En su informe, que será elevado a los líderes de la UE cuando se reúnan la semana que viene en Estocolmo, la Comisión propugna nuevas medidas para eliminar los obstáculos que aún quedan y generalizar un uso más activo de la red.
Ahora que casi todas las escuelas están ya conectadas a Internet, Bruselas propone, por ejemplo, dirigir la atención al interior del aula y fijar como nuevo objetivo la instalación de un ordenador por cada cinco alumnos.
Antes de finales de 2002, los servicios básicos de las administraciones nacionales, como la declaración de impuestos o la matriculación de vehículos deberían ser accesibles vía Internet.
Bruselas propone también que los estados de la UE establezcan entre ellos un sistema de alerta rápida para intercambiar información sobre los eventuales problemas de seguridad ligados al uso de la red.
El informe insta, por último, a los gobiernos a trasponer en el derecho nacional el marco jurídico comunitario para el comercio electrónico y a poner en marcha la sexta versión del protocolo Internet (IPv6) que hará prácticamente ilimitado el número de direcciones de Internet.
