BEIJING.- Arqueólogos chinos descubrieron recientemente un sarcófago con catorce momias de unos 3.000 años de antigüedad, informaron hoy los científicos.
Entre las momias encontradas al oeste del país, hay hombres, mujeres y niños, quienes pertenecerían a una de las familias que vivió en uno de los reinos de esa época.
Los arqueólogos precisaron que las bocas de las momias estaban selladas con laminas de oro, los huecos de la nariz rellenados con algodón, los ojos cubiertos con trozos circulares de piedra y sus rostros protegidos con máscaras.
Las excavaciones se realizan en la localidad de Qiemo, provincia de Xinjiang, fronteriza con el Tíbet.