CENTRO ESPACIAL.- Los ingenieros de la NASA progresaron lentamente el sábado en la reparación de las averías cibernéticas a bordo de la estación espacial internacional, mientras el cohete ruso Soyuz transportaba al primer turista espacial a la instalación, situada 386 kilómetros sobre la Tierra.
La NASA espera que las computadoras operen perfectamente cuando el transbordador espacial Endeavour se separe el domingo de la estación y evitar que coincida con la llegada del Soyuz, programada para el lunes, con el magnate estadounidense Dennis Tito.
Si los problemas continúan, los funcionarios espaciales rusos mantendrán al Soyuz en espera, posiblemente hasta el martes.
"No se acoplarán si el transbordador está allí. No hay duda de esto", dijo el representante de la agencia espacial estadounidense Michael Baker.
La segunda computadora de respaldo, cuyo disco duro pudo haberse descompuesto, fue reemplazada por una computadora de repuesto, y los controladores de vuelo todavía estaban tratando de arreglarla.
Las computadoras de mando y control son vitales para la operación del multimillonario brazo robótico de la estación Alpha.
En la mañana del sábado la principal computadora funcionaba, aunque sufrió una breve falla, y los controladores de vuelo lograron activar una de las dos computadoras de respaldo. "Definitivamente es un avance en la dirección correcta. La situación se ve mejor", señaló el Control de la Misión.
Las fallas de las computadoras retrasaron lo planes de que el brazo robótico pueda transferir su canasta de empaque, de más de 1.350 kilogramos al brazo robótico, más pequeño, sujeto al transbordador espacial. El Control de la Misión espera completar el cambio el sábado, si por lo menos dos computadoras están arregladas.
"Todavía estamos tratando de encontrar el origen de los problemas, y hasta que identifiquemos la causa, vamos a tomarnos las cosas con calma, evitando operaciones que no sean 100% necesarias para la seguridad de la estación", dijo Wayne Hale, un representante del Control de la Misión.
La astronauta estadounidense Susan Helms dijo que el problema no afecta a otras computadoras de la estación, ni otras operaciones.
El transbordador y el Soyuz podrían atracar juntos en la estación, pero si el Soyuz llegara estando el Endeavour acoplado, quedaría a unos 6 metros de distancia. El director de vuelo Phil Engelauf dijo que sería una "distancia incómoda", dado el potencial de interferencia de radio y de contaminación de los cohetes propulsores.