KOROLYOV.- El turista espacial Dennis Tito, deleitado con su estada en la Estación Espacial Internacional, prometió el martes animar a otros a que sigan su ejemplo y dijo que no es necesario ser un "superhumano" para volar al espacio.
Tito, de quien se ha informado que pagó 20 millones de dólares por su viaje de una semana, llegó el lunes a la EEI con dos cosmonautas rusos, después de que la cápsula Soyuz se acoplara al complejo.
Las imágenes de televisión lo mostraron sonriendo, mientras flotaba en la cabina del segmento ruso de la estación.
Tito dijo en una rueda de prensa organizada por el centro de control de la misión, en las afueras de Moscú, que se sentía bien y que la tripulación lo estaba tratando bien.
El millonario californiano, un ex empleado de la NASA, prometió hacer lo que pueda para llevar a otros entusiastas a otra misión similar, a pesar del prohibitivo coste.
"Si hay algo que decir, es que haré todo lo que pueda para comunicar a la gente cuán maravilloso es todo esto. Uno no tiene que ser un superhumano para adaptarse al espacio", dijo.
"Es factible. Desafortunadamente, es todavía muy costoso, pero hay otras personas que pueden costearse un viaje y me gustaría animarles. Eso es lo que yo espero lograr", agregó.
Según Tito, el vuelo fue "todo y mucho más de lo que me esperaba. Es momento de ayudar a otras personas a cumplir sus sueños".
La aventura espacial por pago de Tito originó una disputa entre las autoridades espaciales rusas, ávidas de hacerse con la suma por su pasaje, y la NASA de Estados Unidos, la cual considera que la EEI, que se construye a un coste de 95.000 millones de dólares, no es sitio para aficionados.
Pero Tito, vistiendo pantalones grises y la camiseta azul utilizada por los cosmonautas rusos, dijo a los periodistas que había visitado ya el sector estadounidense de la estación, a pesar de la insistencia de la NASA de que fuera escoltado cuando lo hiciera.
"Al final pude ver el segmento estadounidense probablemente en cuestión de una hora de haber llegado a la estación", dijo el millonario californiano, de 60 años.
Los tripulantes estadounidenses de la EEI, James Voss y Susan Helms, dijo, "se han excedido para mostrarme las instalaciones. Han hecho una labor excelente".
Los rusos en la tripulación, incluyendo el comandante de la EEI, Yuri Usachev, así como los cosmonautas Yuri Baturin y Talgat Musabayev, que lo acompañaron a bordo de la Soyuz, se han convertido "en amigos muy cercanos", agregó.
Tito dijo que las insinuaciones de que sucumbiría al mareo espacial, como sucede incluso con los viajeros espaciales experimentados, habían sido exageradas.
El turista espacial dijo que se sintió ligeramente indispuesto durante las primeras horas a bordo de la estación, pero que se había recuperado rápidamente.