WASHINGTON.- Un tribunal federal de apelaciones revirtió el jueves por unanimidad la decisión de dividir a Microsoft y ordenó que otro juez se encargue del caso. Es una importante victoria para la reconocida empresa tecnológica.
El Tribunal Federal de Apelaciones por el Distrito de Columbia mantuvo el fallo de que Microsoft violó las leyes antimonopólicas, pero ordenó que un nuevo juez se encargue de la fase punitiva del caso.
Por votación de 7-0, el tribunal de apelaciones concluyó que el juez federal Thomas Penfield Jackson formuló comentarios indebidos a los medios informativos y fuera de la corte, lo que dio la apariencia de que tenía prejuicios contra Microsoft.
Las acciones del juez "darían a un observador razonable e informado motivos para poner en duda su imparcialidad al ordenar que la empresa fuera dividida en dos", dijo el tribunal.
Los jueces dijeron que Jackson "mantuvo contactos en parte impermisibles al mantener entrevistas secretas con miembros de los medios informativos y formuló numerosos comentarios ofensivos sobre los directivos de Microsoft en declaraciones públicas fuera de la corte, dando la impresión de una aparente parcialidad", dijo el tribunal.
"Aunque no encontramos pruebas de prejuicios, mantenemos que las acciones del juez encargado del caso empañaron seriamente los procedimientos ante el tribunal federal y pusieron en duda la integridad del proceso judicial", agregaron los magistrados.
Microsoft aplaudió la decisión que revocaba el fallo que ordenaba la división empresa tecnológica. El fallo "retira la nube de división que se asomaba sobre la compañía" y "reduce este caso de manera significativa", dijo el portavoz de Microsoft Jim Cullinan.
Las acciones de Microsoft bajaron 89 centavos de dólar, a 70,25 dólares poco antes de que fuera anunciado el fallo. Esas acciones subieron 3,82 dólares, a 74,96 antes de que su contratación fuera interrumpida en la bolsa de valores Nasdaq.
Aunque rechazó la división de la empresa, el tribunal se negó a derogar la conclusión de que Microsoft actuó como un monopolio ilegal para obtener una ventaja injusta ante sus competidores, especialmente con buscadores (browsers) rivales.
El tribunal de apelaciones dijo que concordó "con el tribunal federal que la empresa se comportó anticompetitivamente y que estas acciones contribuyeron al mantenimiento de su poder monopólico".
Jackson había fallado que Microsoft había cometido acciones anticompetitivas al incorporar su sistema operativo Windows a su sistema buscador Explorer. Concluyó que la empresa es un monopolio ilegal y ordenó que la empresa de software sea dividida en dos partes independientes.