WASHINGTON.- Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Nueva York han informado hoy del descubrimiento de una nueva vacuna capaz de frenar el avance del mal de Alzheimer en ratones que habían sido genéticamente modificados para reproducir los efectos de la enfermedad.
La vacuna no ha sido experimentada aún con pacientes, pero se espera que pueda probarse en un plazo de un año, señalaron los científicos.
Los investigadores, que han publicado su descubrimiento en la revista American Journal of Pathology, afirman que la vacuna reduce hasta casi un 90 por ciento las placas que se forman en el córtex del cerebro en relación con el mal de Alzheimer y en un 80 por ciento las del hipocampo.
No obstante, los científicos no están aún totalmente seguros de si esas placas, llamadas amiloides, que aparecen en el cerebro y destruyen las células nerviosas, son la causa de la enfermedad o un efecto de la misma.
Se denominan así porque son producidas por una proteína tóxica, la "beta-amiloide", que se genera en el cerebro.
Cerca de 150 millones de personas padecen el mal de Alzheimer en el mundo, dolencia que engloba a más del 50 por ciento de las demencias de personas mayores de 65 años.
Recientemente, la firma Elan Corporation, con sede en California, anunció que había desarrollado una vacuna contra la enfermedad de Alzheimer que mostraba también resultados prometedores en una primera fase de los experimentos, en los que había estimulado la respuesta inmunológica de los pacientes.
La vacuna podría prevenir la aparición de la enfermedad y, aunque no permite recuperar las zonas dañadas del cerebro en quienes ya padecen el mal, podría al menos detener su avance, dijeron fuentes de la firma.
La vacuna se conoce como AN-1792 y ha sido probada en 100 personas que padecen el mal de Alzheimer, en un grado entre leve y moderada, según Ivan Lieberburg, jefe científico de la Elan Corporation.