TOKIO.- El programa espacial de Japón recibió el miércoles un gran impulso al lograr colocar en órbita un satélite de prueba lanzado al espacio por un cohete de fabricación nacional.
El centro de lanzamientos, en una pequeña isla del sur del país, estalló en aplausos cuando los controladores de la misión pudieron confirmar que el cohete H2-A había colocado un satélite de prueba a 1.800 kilómetros sobre la superficie terrestre.
Pero, sobre todo, la sensación prevaleciente era de alivio, después de una serie de sonados fracasos y retrasos exasperantes, que habían socavado la confianza del país en su programa espacial.
"Lo más significativo acerca del lanzamiento es que representa un progreso considerable en la tarea de recuperar la confianza del pueblo de este país, que casi se había perdido ya", dijo Shuichiro Yamanouchi, director de la Agencia Nacional de Desarrollo Espacial.
El programa de desarrollo misilístico de Japón ha estado afectado por problemas mecánicos, gastos excesivos que han superado el presupuesto y dos lanzamientos frustrados.
Hace dos años, los controladores de la misión detonaron un cohete en pleno vuelo para impedir que se saliese del curso previsto.
La prensa japonesa dijo la semana pasada que algunos funcionarios de la agencia espacial habían preparado cartas de renuncia para el caso de que este nuevo lanzamiento fuese otro fracaso.
Pero el único problema del miércoles fue un defecto en uno de los indicadores de combustible que retrasó el lanzamiento tres horas, pero pudo ser corregido.
En la Internet:
NASDA:
http://www.nasda.go.jp
Instituto espacial japonés:
http://www.isas.ac.jp