LONDRES.- Una revisión británica de las antenas de telefonía móvil mostró que el grado de radiación liberada está cientos de veces por debajo de las pautas internacionales recomendadas, dijo este lunes el gobierno.
Un estudio determinó que el grado de emisiones electromagnéticas estuvo entre cientos y varios miles por debajo de los límites establecidos por la Comisión Internacional de Protección de la Radiación no Ionizante.
Pero el ministro de Industria, Douglas Alexander, prometió repetir la investigación, que examinó 100 antenas transmisoras y estaciones de base situadas cerca de las escuelas, y añadió que la ampliaría a otros lugares donde hubiera antenas.
Hace dos años, una investigación patrocinada por el gobierno y dirigida por Sir William Stewart, instó a los padres a que redujeran el uso de teléfonos móviles por parte de sus hijos, y prometió normas más estrictas para regular las antenas transmisoras como medida precautoria contra posibles riesgos para la salud derivados de la radiación.
"Los teléfonos móviles están cambiando la forma en que vivimos y trabajamos. Estoy comprometido a continuar este programa debido a que las comunicaciones con móviles siguen siendo importantes para el desarrollo de nuestra sociedad y la economía", dijo Alexander en un comunicado.
La auditoría estuvo a cargo de la Agencia de Radiocomunicaciones durante el 2001. Este año, se está realizando por segunda vez.
Ivan Lewis, ministro de Asuntos Juveniles y Aprendizaje, dijo que los padres tenían todo el derecho a sentirse preocupados aunque la investigación de Stewart no hubiese hallado ninguna evidencia de riesgos para la salud.
"Las estaciones de base cerca de las escuelas pueden ser una causa de preocupación real para los padres y las escuelas", dijo el ministro.
"Los resultados de la auditoría constituyen un paso importante para asegurar al público que las estaciones de base operan dentro de las normas internacionales correspondientes", agregó.