SEPANG.- Malasia desplegó el martes dos perros sabuesos en su lucha contra la piratería de música y películas, convirtiéndose en el primer país en utilizar animales para interceptar discos de grabaciones ilegales escondidos entre las mercancías.
"Flo" y "Lucky", dos perras de raza Labrador Negro, demostraron su técnica para encontrar discos olfateando entre pilas de cajas de cartón selladas en un hangar de mercancías aéreas y señalando un paquete sospechoso sentándose delante de él.
"Es eficaz tanto en costo como en tiempo", dijo el ministro de Comercio Interior Shafie Apdal, añadiendo que las perras sólo necesitaron 10 minutos para registrar unas pilas de cajas en las que los agentes de seguridad hubieran gastado un día entero.
Malasia, que figura en una lista de vigilancia de la piratería de Estados Unidos, ha acelerado notablemente sus esfuerzos para acabar con los piratas de los derechos de autor mientras negocia un pacto de libre comercio con Estados Unidos.
Shafie dijo que Malasia probaría con los perros durante un mes, llevando a cabo búsquedas en puestos fronterizos, en hangares de mercancías y en centros de almacenamiento para ver dónde funcionan mejor antes de que el Gobierno tome la decisión de crear o no una unidad canina permanente.
Entrenados por un experto en Irlanda del Norte que habitualmente enseña a perros a encontrar bombas, Lucky y Flo pueden encontrar discos, pero no distinguir entre CD y DVD o entre legítimos o piratas.
"Sin embargo, los perros serán valiosos para localizar discos enviados en contenedores improbables o no registrados", dijo el Ministerio de Comercio.
El gobierno ha gastado 17 mil dólares, incluidos ocho meses de entrenamiento para detectar las sustancias químicas utilizadas en los discos ópticos, añadió una autoridad.
"Nadie ha entrenado antes a perros para olfatear policarbonato", dijo.
En el 2006, las autoridades malayas capturaron 25 máquinas duplicadoras VCD, con capacidad para piratear 87 millones de discos al año.
La piratería en la región Asia-Pacífico supuso pérdidas de 1.200 millones de dólares el pasado año.