SANTIAGO.- Investigadores de Boeing y empresas asociadas están evaluando realizar un vuelo experimental que funcione impulsado con baterías. Las pruebas tendrían lugar este año en España.
El pequeño avión utiliza una Membrana de Intercambio de Protones (PEM es su sigla en inglés), un sistema híbrido de célula de combustible con baterías de iones de litio que hace funcionar un motor eléctrico montado a un propulsor tradicional. La energía sirve para la fase “crucero” del vuelo.
Para el despegue y aterrizaje necesita más poder, para lo que dispone de baterías livianas de iones de litio.
“Dada la eficiencia y los beneficios para el medioambiente de este tipo de energía, Boeing quiere estar a la vanguardia del desarrollo y aplicación de ella para los productos aeroespaciales” declaró Francisco Escarati, director del proyecto Boeing Research and Technology Europe. “Este avión es un importante paso en esa dirección”.
La célula de combustible es un dispositivo electroquímico que convierte el hidrógeno directamente en electricidad, pero sin hacer combustión. Están libre de emisión de gases y es mejor que los motores que funcionan con hidrocarbonos. Ahorra combustible y es más limpio.
“Mientras Boeing no imagine que las células de combustible proveerán energía para futuros vuelos comerciales de pasajeros, este tipo de demostraciones ayuda a pavimentar el camino para usos potenciales de esta tecnología en pequeños aviones con tripulación, o sin ella” aclara Escarti. “Esto también nos da experiencia para complementar otros estudios que realizará la compañía”.