BEIJING.- Las autoridades chinas, las más censoras del mundo según diversas ONG, han propuesto un código de conducta voluntaria de auto-censura en internet al que tendrán que avenirse los 22 millones de “blogueros” chinos, informó hoy la prensa local.
El borrador supone una vuelta de tuerca más en la censura de las bitácoras y chats que se han convertido en el primer foro de discusión de la población en la historia de China, país que cuenta ya con 144 millones de internautas (segundo en el mundo por detrás de EE.UU., que tiene 198 millones).
Según informa hoy el diario “South China Morning Post”, el borrador, destinado también a los proveedores de servicios, ha sido propuesto por la semi-oficial Sociedad de Internet de China, que recibirá sugerencias y opiniones durante una semana.
Se trata del último paso en la redacción del código, en el que han contribuido portales tan populares como MSN, Sina.com, Sohu.com y People.com.cn.
El código está destinado “a reforzar la regulación de las responsabilidades y obligaciones de los blogueros y los servicios de blog a través de una auto-regulación de la industria y de un formato acordado”.
Asegurar el “continuo desarrollo saludable de Internet en China" es otro de los objetivos, ya que “algunos están utilizando los ’blogs’ para difundir información insana, perturbar seriamente el orden social y los intereses públicos y contaminar el entorno de Internet”.
La eliminación de “información vulgar” y de “la basura cultural" se menciona también en la propuesta del código, mediante el cual los ’blogueros’ tendrán que firmar un acuerdo comprometiéndose a no difundir contenidos “insanos, ilegales, pornográficos, difamatorios o falsos que puedan infringir” los derechos legales de los demás.
De firmarlo, tendrán también que eliminar de inmediato este tipo de contenidos.
Por su parte, los proveedores de servicios tendrán que controlar que los usuarios cumplen con sus obligaciones y pueden negar sus servicios a quien se niegue a firmar el código.
Los ’blogueros’ estarán obligados a usar su nombre real en el registro, lo que ha generado una gran oposición entre la comunidad de internautas chinos, que reciben a través de numerosas bitácoras información prohibida o censurada en los medios oficiales.
La Sociedad de Internet ha estado trabajando durante dos años con el Ministerio de la Industria de la Información para implantar este registro de bitácoras con nombre real que sin duda reducirá la ya precaria libertad de expresión en la red china.
Según la organización defensora de la libertad de prensa en el mundo Reporteros Sin Fronteras, China es desde hace dos años "la mayor prisión del mundo para periodistas”, al mantener encarcelados a medio centenar de reporteros y “ciberdisidentes”.