NUEVA YORK.- Inspirados en el Premio Nobel otorgado el año pasado a un hombre apodado "el banquero de los pobres", los microcréditos a pequeñas empresas en los países más pobres del mundo prosperan a medida que cada vez más individuos descubren que pueden ser su propio mini Banco Mundial.
Y no hay que ser Bill Gates para entrar en acción.
Un sitio web de microfinanzas que permite dar créditos desde US$25 dólares a pequeñas empresas desde Vietnam a Kenia ha despertado una avalancha de peticiones de prestamistas.
Kiva.org, descrita por su fundador Premal Shah como un "eBay para las microfinanzas", lleva operando dos años pero tuvo su gran despegue después de que el economista de Bangladesh Muhamad Yunus ganó el Premio Nobel de la Paz el pasado año como fundador del Grameen Bank.
"De la noche a la mañana el volumen de tráfico de nuestro sitio se duplicó", dijo Sha sobre el impacto del Premio Nobel, al destacar que la reciente publicidad y una mención en el nuevo libro de Bill Clinton "Giving" ha provocado otra oleada de interés que les ha dejado buscando a más gente para prestar todo el dinero que tienen disponible.
Kiva trabaja con decenas de grupos de microcréditos que eligen comercios o negocios necesitados, desde una mujer hondureña que vende cosméticos hasta un negocio de tejidos camboyano o un tienda de reparación de calzado en Ghana.
"Estamos ofreciendo una plataforma online para conectar a microfinancistas con alguien en Des Moines, Iowa o Londres", dijo Shah a Reuters.
El usuario promedio financia cuatro negocios en la página web y suele poner US$25 dólares en cada uno y hasta ahora los prestamos totalizan unos US$11 millones de dólares sin intereses, precisó.
La web espera prestar US$100 millones de dólares en los próximos tres años.
El sitio tiene fotografías y planes de negocio de gente que busca cantidades que oscilan entre los US$75 hasta más de 1.000 dólares.
Cada empresa es valorada analizando si no ha devuelto préstamos en el pasado, cuánto tiempo lleva funcionando y la cantidad total de préstamos.
"Si no cumplen, ya no recaudan más dinero", dijo Shah.