KUALA LUMPUR.- La ONG “eHomemaker” y su fundadora, Chong Sheau Ching, han logrado convertir durante la última década a miles de madres solteras sin recursos en pioneras en el uso de la tecnología y el comercio electrónico desde casa en Malasia.
Esta organización cuenta en la actualidad con una comunidad de 15.000 emprendedores digitales con negocios relacionados con la traducción, servicios de “catering”, cuidado de personas mayores o niños y comercio de objetos artesanales.
"Homemaker”, en inglés, se utiliza tanto para las amas de casa, también llamadas “housewives,” como para las personas que trabajan desde sus hogares.
"Al inicio comencé ’eHomemaker’ como una plataforma para ayudar a aquellas madres solteras que habían decidido trabajar desde casa para poder educar ellas mismas a sus hijos”, explicó a Efe su fundadora y directora.
"Luego, fuimos ampliando nuestros objetivos con mujeres y madres solteras sin recursos y ahora incluso un tercio de nuestra comunidad es masculina”, agregó.
Su último proyecto es vender cestas con papel de revistas que elaboran mujeres con problemas psiquiátricos y de inserción social.
Tras obtener un MBA en una universidad norteamericana, Chong, malasia de origen chino, trabajó durante los años 80 y 90 en varios proyectos de desarrollo a través de las nuevas tecnologías de la ONU en países como Irán y Egipto.
A finales de los noventa, volvió a Malasia y en tan sólo unos meses su marido la abandonó y se vio convertida en un ama de casa con un bebé recién nacido a su cargo, con los exiguos ingresos que le dejaba su profesión como escritora freelance.
"Tenía la opción de buscar trabajo en una gran corporación y dejar a mi hija al cuidado de una niñera, pero decidí trabajar desde casa”, relató Chong, quien recordó la incomprensión que sufrió por parte de familiares y amigos.
"Ahora es más normal que la gente quiera trabajar desde casa, pero hace trece años parecía una locura. La gente decía cosas como que me habían echado de mi trabajo en la ONU o que no estaba en mis cabales y había decidido echar por tierra mi carrera para convertirme en ama de casa”, afirmó.
Tras publicar “The Star”, el periódico en inglés de mayor tirada del país, una columna en la que hablaba sobre su experiencia en el trabajo desde casa, recibió más de 40 correos electrónicos de otras mujeres que estaban en su misma situación.
"En 1998, empezamos como una comunidad de voluntarias y organizábamos conferencias y charlas sobre como iniciar un negocio que se pudiera dirigir desde el mismo hogar con la ayuda de Internet y las nuevas tecnologías”, recordó.
Todas estas conferencias fueron reunidas en un libro titulado "Trabajando desde casa: una guía para mujeres trabajadoras y ’homemakers’.”
En 2003 y sólo cuatro años después de su creación, www.ehomemakers.net, reunía a una comunidad de miles de madres y mujeres trabajadoras y pasó de ser un grupo de voluntariado a una "empresa social de emprendedores”.
Tras casi una década, Chong es considerada hoy una “pionera digital” por organizaciones de ayuda al desarrollo y pronuncia conferencias en eventos internacionales.
Ha recibido distintos reconocimientos, como varios premios para la realización de estudios por parte de la Red Pan Asiática, asociación canadiense que promueve el desarrollo de este continente mediante las nuevas tecnologías.
El próximo mes de diciembre, Chong participará en una conferencia internacional en Kuala Lumpur sobre el mismo asunto a la que está previsto que asista el nuevo secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon.