LOS ANGELES.- Los editores de videojuegos, en un atípico gesto de solidaridad, unieron sus fuerzas para transmitir optimismo sobre el futuro de una industria que mueve 30.000 millones de dólares, a pesar de la caída del gasto del consumidor y de la recesión económica mundial.
Electronic Arts, THQ y Activision -esta última la única empresa en reportar ganancias en el último trimestre- esperan concentrarse principalmente en el desarrollo de títulos superventas, mientras encuentran formas de eliminar costos.
Un largo año de recesión ha reducido el crecimiento de las ventas. La empresa de mercados NPD estima que el gasto de en videojuegos en Estados Unidos cayó un 17 por ciento en abril.