MOSCÚ.- Los seis participantes en el simulacro de un vuelo a Marte abandonarán mañana el módulo científico en el que habrán estado aislados del mundo exterior durante 105 días, informó hoy el Instituto de Problemas Biomédicos (IPBM) de la Academia de Ciencias de Rusia.
"Estos son los últimos días del experimento. Los chicos trabajan según el programa. Por la tarde harán las maletas y celebrarán una cena de despedida", precisó una fuente de ese centro, donde se realiza el ensayo, citada por la agencia Interfax.
El martes, después de levantarse, los participantes en el vuelo simulado a Marte pasarán la revisión médica diaria, que realiza uno de los miembros del equipo, tras lo cual llevarán a cabo los últimos experimentos y se prepararán para salir.
A las 14.00 hora de Moscú, los voluntarios abandonarán el módulo científico, en el que entraron el pasado 30 de marzo, y deberán pasar otro examen médico antes de poder regresar a sus casas esa misma tarde.
Además, durante las dos próximas semanas deberán someterse cada dos días a una revisión médica en el IPBM.
El experimento de 105 días estuvo dividido en tres partes: el vuelo de la nave en la órbita terrestre, el vuelo a Marte y la estancia del aparato en la órbita marciana.
En los dos últimos simulacros, las señales de radio y de video eran transmitidas con un retraso de 20 minutos, que es el tiempo que tardan en llegar a la Tierra desde el Planeta Rojo y viceversa.
De este modo, la tripulación de la nave tenía que resolver todos los problemas de manera autónoma, sin ayuda desde la "Tierra".
Integran el equipo el cosmonauta ruso Serguéi Riazanski, de 34 años, el comandante del equipo, además de su colega Oleg Artémiev (37 años), el maestro de deportes Alexéi Shpákov (40) y el médico Alexéi Baránov (33 años).
Los otros participantes son el piloto francés de aviación civil Cyrille Fournier, de 40 años, y el ingeniero alemán Oliver Knickel, de 28.
Los seis voluntarios recibirán por su participación 15.000 euros, además de pluses por la realización con éxito de experimentos.
El simulacro fue ideado para poner a prueba la compatibilidad psicológica y la tolerancia de los integrantes de la tripulación y permitir a los científicos estudiar día a día los efectos del aislamiento de larga duración.