EMOLTV

Más de 4 millones de usuarios chilenos cuenta la red social Habbo

Conscientes de que la mayoría de los usuarios son adolescentes, hay estrictas reglas de comportamiento dentro de la red virtual.

21 de Octubre de 2009 | 16:21 | El Mercurio Online
imagen

Esta es la puerta de entrada al mundo Habbo.

Habbo.cl

SANTIAGO.- Los responsables de la red social virtual "Habbo", están felices por ser el sitio de estas características con la más alta participación en el mercado chileno, donde además se forma la comunidad de habla hispana más importante dentro de este mundo virtual, de acuerdo a las cifras entregadas por la compañía.


Por este motivo los ejecutivos de la compañía, liderados por su Business Manager para Latinoamérica, Regina San Miguel, escogieron Chile para presentar los resultados obtenidos en la región y de paso celebrar al usuario chileno número 4.101.988


Creada 10 años atrás por la empresa finlandesa Sulake, "Habbo" se jacta de ser una comunidad virtual consolidada y de gran potencia socializadora.


Habbo es un juego tridimensional en el que los participantes se relacionan entre sí en un edificio virtual llamado Habbo Hotel. Cada visitante, al momento de registrarse, asume un personaje, lo caracteriza, lo hace interactuar y moverse en el ciberespacio a su total voluntad.

Cada cual decide su “look” y personalidad, pudiendo ser quien uno es, o quien se quiere ser. Es un mundo en el ciberespacio, donde se puede experimentar con los valores y reglas que se dan en la realidad, como la amistad, el sentido de pertenencia o el intercambio.

Estrictas normas

La empresa también explica que una de las cosas que caracteriza al sitio es su seguridad. Una de las primeras reglas es no facilitar ningún dato personal. El código de buenas conductas del juego se denomina "la Manera Habbo". Si se quebranta, el usuario puede ser alertado, sacado momentáneamente de una sala o, incluso, expulsado del hotel.

Todas las zonas tienen un filtro que detecta las palabras ofensivas, los insultos, las coacciones, los comentarios racistas, sobre sexo, las direcciones de email, los números de teléfono. Por tanto, es imposible contactar con un usuario en la vida real, su nombre real, su cara real y su personalidad real. Toda relación se queda en comunicación virtual. En el anonimato.

El catálogo de penalizaciones es duro: dos horas expulsado por comportamiento racista, una semana si alguien intenta llevar fuera de la web a otra persona para averiguar sus datos y 30 días si pide su contraseña. Y si se descubre una conducta de "cibersexo", expulsión permanente.


La red es constantemente patrullada por moderadores –en todos los idiomas y comunidades‐ que siguen las discusiones, rechazan y dejan fuera a los infractores y ayudan a los usuarios con sus preguntas e intereses. Por si esto fuera poco, Habbo ocupa guías para educar respecto de las normas y cuenta, además, con filtros automáticos de lenguaje.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?