BRUSELAS.- La Comisión Europea abrió hoy un proceso investigador contra la multinacional Philips y otras empresas del sector de la electrónica de consumo por supuestamente haber pactado precios y distribuirse entre ellos el sector de los tubos de rayos catódicos.
Según Bruselas, su actuación es contraria a las reglas que impone el derecho comunitario de la Competencia.
En caso de que los expertos de la Comisión de los 27 socios comunitarios determinen que, en efecto, esas empresas violaron las normas de los tratados, les podrían imponer elevadas multas.
La Comisión Europea no quiso decir qué empresas están siendo investigadas ni cuántas son objeto de análisis, aunque Philips confirmó hoy haber recibido una misiva de Bruselas en la cual están contenidas esas acusaciones.
La multinacional de Eindhoven aclaró mediante un comunicado que va a colaborar "plenamente" en las investigaciones, aportando al Ejecutivo de Bruselas toda la información necesaria.
Bruselas abrió en 2007 varias investigaciones, por sorpresa, en las oficinas de varias empresas europeas que fabrican tubos de rayos catódicos, como los que se usan en televisores y computadores.
Ahora toca a las empresas investigadas aportar los datos que les pide Bruselas para evitar tener que abonar eventuales multas.
