COPENHAGUE.- Más de la mitad de los 192 países que participan en las conversaciones sobre el clima organizadas por la ONU en Copenhague respaldan metas más duras para limitar el calentamiento global que las apoyadas por las naciones ricas, dijo el lunes un pequeño grupo de islas Estado.
El grupo, que dice que el aumento en el nivel de los mares podría borrarlos del mapa, se quejó de que el globo terráqueo de cinco metros que cuelga en la conferencia de Copenhague omite muchos Estados insulares ubicados en zonas como el Océano Pacífico o el Océano Indico.
Dessima Williams, titular de la Alianza de Pequeños Países Insulares (AOSIS, por su sigla en inglés), conformada por 43 Estados miembros, dijo que más de 100 países habían firmado por una meta que limite el aumento de la temperatura a 1,5 grados Celsius sobre niveles pre industriales.
Previamente en agosto 86 países lo habían firmado.
"La mitad de Naciones Unidas está pidiendo metas ambiciosas y específicas", dijo Williams, de Granada, en una conferencia de prensa en el marco de la reunión que se realiza del 7 al 18 de diciembre entre 192 naciones que intentan alcanzar un nuevo pacto que suceda al Protocolo de Kioto de la ONU.
Los países menos desarrollados, principalmente en África, y pequeños Estados insulares, respaldan la meta de 1,5 grados Celsius, que implicaría recortes para el 2020 en las emisiones de gases de efecto invernadero de países ricos de al menos un 45 por ciento desde los niveles de 1990.
Cualquier acuerdo en Copenhague deberá ser alcanzado en forma unánime. Sin embargo, el alcance del límite a las emisiones para los países ricos y el monto del financiamiento para ayudar a los Estados pobres están entre las principales trabas para un pacto.
La mayoría de los Estados desarrollados y economías emergentes líderes, encabezadas por China e India, respaldan una meta para limitar el calentamiento a un máximo de 2 grados Celsius sobre épocas pre industriales. Las temperaturas ya han subido en 0,7 grados Celsius y se espera que suban mucho más.
Williams dijo que AOSIS quiere alcanzar un tratado legalmente vinculante en Copenhague y no sólo declaraciones políticas, que son favorecidas por los países desarrollados.
Incluso con el actual calentamiento, Williams precisó que muchas islas están sufriendo "daño significativo, algunas se están hundiendo, algunas están perdiendo sus suministros de agua fresca". Además, algunos arrecifes de coral también están siendo afectados por el aumento de las temperaturas.
Antonio Lima, de Cabo Verde, quien es vicepresidente de AOSIS, comparó el cambio climático con la erupción volcánica del monte Vesubio, que hace 2.000 años sepultó a la ciudad romana de Pompeya.
"Ellos no sabían lo que enfrentaban. Ahora nosotros sabemos qué es lo que va a suceder. Será el planeta de Pompeya", concluyó.