Agencias
SEÚL.- Los fabricantes asiáticos de teléfonos que dependen del sistema Android de Google podrían aumentar su exposición a las plataformas de rivales como Windows de Microsoft, amenazados por la compra de Motorola en 12.500 millones de dólares por parte de Google.
HTC de Taiwán y Samsung de Corea del Sur vendió millones de aparatos móviles que funcionan con el software gratuito Android desde el 2008, lo que ayudó a llevar a Google al primer lugar en el mercado en auge de software para aparatos móviles.
Pero la adquisición de Motorola transformará el escenario de aparatos móviles y podría convertir a Google de socio a competidor de más de otras 30 compañías que usan Android.
"El acuerdo hará que muchos de los operadores de Android entienda cuánto dependen de Google y cuán rápido los planes de Google pueden cambiar sus negocios", dijo Francisco Jeronimo, un analista de la firma de investigación IDC.
"Samsung, HTC, y Sony Ericsson podrían mirar a otras plataformas como una vía para diversificar el riesgo de ser demasiado dependientes de una plataforma", agregó.
Wall Street rápidamente designó a Microsoft como uno de los ganadores con el acuerdo, por el beneficio potencial que recibiría Windows si la adquisición aliena a los otros fabricantes de aparatos que dependen de Android.
Samsung y Apple han estado enfrascados en una áspera batalla sobre patentes de teléfonos inteligentes y Tablet PCs desde abril.
Una agencia comercial estadounidense está revisando separadamente una queja de Apple por infracción de patente en contra de HTC.
Samsung y HTC dijeron oficialmente que recibían con beneplácito un acuerdo que podría solucionar sus propias batallas legales sobre patentes, pero algunos analistas pusieron en duda la sinceridad de esas afirmaciones.
"El peligro es que otros fabricantes de aparatos se sientan privados del derecho a voto", dijo Richard Windsor, especialista en tecnología global de Nomura Securities. "Motorola es el jugador más débil. Esto en la práctica, podría hacer colapsar a toda la comunidad", agregó.