Según informó el vicepresidente de la empresa, el cliente más importante de McAfee es el Gobierno de Estados Unidos.
BloombergMADRID.- La compañía de seguridad en internet McAfee considera que tanto la industria como los gobiernos podrían hacer más para conseguir que internet sea un lugar más seguro, aunque cree que los esfuerzos deben ir encaminados a la persecución y prevención de ataques más que al desarrollo de nuevas normativas.
"Me gustaría ver a los gobiernos teniendo un papel más activo en la lucha contra el cibercrimen, aunque es un gran desafío. (...) Aprobar una ley no va a hacer que el problema se acabe, el desafío está en perseguir y prevenir", sostuvo Matt Fairbanks, vicepresidente senior de productos y soluciones de McAffe.
En la actualidad, ha afirmado, los países están gastando "enormes cantidades de dinero" para asegurar su información y sus equipos. De hecho, ha reconocido que el cliente más importante de McAfee es el Gobierno de los Estados Unidos.
Fairbanks ha indicado que cada día se detectan en internet entre 60.000 y 65.000 nuevas amenazas y considera que, aunque es muy difícil averiguar quién se encuentra detrás de cada ataque y perseguirlo, "industria y gobiernos podrían hacer más por la seguridad en la red", ha insistido.
El directivo ha apuntado que la "mayoría" de los ataques en la red tienen una motivación económica, aunque ha alertado sobre el aumento del ciberterrorismo -que "en ocasiones procede de naciones"- y del "hacktivismo".
"Información es poder y si la gente puede acceder a ella gozará de una ventaja tremenda. Cada vez más, vemos cómo naciones y ejércitos utilizan cibertecnología para promover su agenda", ha dicho.
A pesar de que hay numerosos tipos de "malware", y Fairbanks ha asegurado que las herramientas para crearlos están al alcance de cualquiera en la red, el directivo ha explicado que las amenazas "más peligrosas" y también la más "intrincadas" son las "persistentes avanzadas".
Estas utilizan mecanismos "muy sofisticados" para acceder a propiedad intelectual e información confidencial de empresas y gobiernos. Cuanto más valiosa es una compañía o más rico un país, más probabilidad tendrán de padecer estos ataques, según el directivo.
Fairbanks ha advertido de que "la mayoría de ejecutivos y de consumidores no son conscientes de la magnitud del problema del cibercrimen" y se ha quejado de que, en ocasiones, no se dé credibilidad a los consejos de McAffe y se le acuse de crear un estado de alarma.
El directivo de la compañía de seguridad descarta que se vaya a erradicar el cibercrimen -"va a ser una persecución constante"-, aunque está convencido de que se pueden conseguir avances.
En esa lucha, Fairbanks considera que la reciente adquisición de McAfee por parte de Intel impulsará la creación de "una comunidad, un movimiento en la industria para hacer de la red un lugar más seguro".