TOKIO.- Las autoridades de Fukushima prohibieron hoy a unas 2.300 granjas de la provincia la distribución de arroz por la contaminación radiactiva, lo que eleva a más de 4.300 el número de explotaciones en las que se ha vetado comercializar el cereal.
Los últimos cultivos en los que se ha detectado cesio radiactivo proceden de la ciudad de Date, 60 kilómetros al noroeste de la planta y segunda localidad en la que se han encontrado partidas contaminadas.
A mediados de este mes se hallaron altos niveles de cesio en el grano de varias granjas de la zona de Onami, en la capital de la provincia y donde inmediatamente se prohibió la venta de arroz. En total 4.322 explotaciones agrícolas de seis ciudades de la provincia de Fukushima no podrán vender el cereal después de que algunas muestras de Date llegaran a alcanzar un nivel de 1.050 becquereles por kilo, muy por encima del límite de 500 becquereles establecido por el Ejecutivo nipón, según la agencia local Kyodo.
Las autoridades desvelaron también que nueve kilos de arroz contaminado de Date han sido vendidos en la propia ciudad, lo que supone la primera vez que se detecta que grano con niveles excesivos de cesio llega a los consumidores tras el accidente en la central nuclear de Fukushima Daiichi.
El Gobierno de Fukushima, que tras el accidente nuclear examina el arroz de las granjas situadas en las 48 localidades que lo cultivan en la provincia, aseguró que investiga quién adquirió el cereal. Por otra parte, el Ministerio de Medioambiente nipón informó hoy de que los altos niveles de cesio registrados el mes pasado en un solar municipal de la ciudad de Kashiwa, a 200 kilómetros de la central nuclear y 18 de Tokio, se deben previsiblemente a emisiones de la planta.
Según un informe del Ministerio recogido hoy por Kyodo, el material radiactivo probablemente proceda del agua de lluvia que se filtró al terreno desde una zanja. La radiación se detectó en un área de terreno de 4 metros cuadrados, donde se llegaron a registrar 4,11 microsievert por hora a un metro de altura del suelo, y hasta 450.000 becquereles de cesio radioactivo por kilo de tierra. El Ministerio planea expandir la zona de medición y publicar un informe definitivo posiblemente para final de año.