Felicity Aston arrastra un trineo con provisiones mientras camina hacia el Polo Sur, tal como en esta imagen suya tomada en otra expedición realizada en 2010.
AP
CARACAS.- El clima ventoso y el agrietado terreno han retrasado la expedición a través de la Antártida que lleva a cabo Felicity Aston, quien intenta convertirse en la primera mujer en cruzar sola el continente helado.
En una entrevista con la agencia AP a través de teléfono satelital, Aston afirmó que ha esquiado hasta el momento unos 220 kilómetros y le quedan 370 kilómetros por recorrer para alcanzar el Polo Sur.
"Estoy retrasada unos cinco días, pero todas estas cosas son relativas, así que todavía no es un desastre", señaló.
Aston camina y remolca con su cuerpo un trineo con provisiones. Cada noche levanta su tienda en el desierto helado y envía actualizaciones de sus progresos vía Twitter en la cuenta @felicity_aston.
"Hoy fue como esquiar sobre las nubes. Todo se veía borroso en los bordes. Buen tiempo para viajar, gracias a Dios!" escribió el martes en su cuenta.
Riesgo por grietas en el hielo
En el contacto telefónico, la exploradora relató que la visibilidad en el lugar que atraviesa "ha estado muy mala. Ha habido una gran cantidad de nieve alrededor. Pero hoy fue un buen día", añadió.
La exploradora reconoció que los incesantes vientos han disminuido su ritmo. También debió seguir una ruta sinuosa para evitar grietas, lo que también retrasa su avance.
Aston, de 33 años, partió el 25 de noviembre en un viaje de más de 1.700 kilómetros que debía durar unos 70 días, según su planificación inicial.
Tenía la esperanza de llegar al Polo Sur para el 13 de diciembre, con motivo del centenario del logro del noruego Roald Amundsen, quien dirigió al primer equipo que alcanzó el polo, lo que ahora se ve difícil.
Más de 30 equipos se dirigen hacia el Polo Sur este año a fin de intentar llegar a tiempo para celebrar el aniversario. "Me voy a perder la fiesta", se lamentó Aston en tono de broma.
La exploradora pasó casi tres años como meteoróloga del British Antarctic Survey y en 2009 encabezó un grupo de mujeres en un viaje desde la costa hasta el Polo Sur.
"Me entrené y preparé tan bien como pude para lo que pensé sería la presión mental, pero ciertamente me tomó por sorpresa qué tan afectada me sentí por estar sola", señaló.
Si tiene éxito, Aston se convertiría en la primera persona en cruzar la Antártida en solitario únicamente con la energía de sus músculos. El noruego Boerge Ousland hizo previamente un viaje de 64 días en 1997, pero aprovechó el viento a su favor, atándose al cuerpo un artefacto similar a un paracaídas que actuó como "vela".