SEÚL.- La empresa coreana Samsung dio la primera mala noticia del actual ciclo de actualización de Android a Ice Cream Sandwich: su teléfono Galaxy S y la Galaxy Tab no podrán usar el nuevo sistema operativo.
La decisión de Samsung sólo afecta al Galaxy S original, lanzado el año pasado (ya se confirmó que el S II y la línea 2011 de smartphones serán actualizados) y a la primera Galaxy Tab, lanzada en noviembre de 2010.
La razón, según afirmó la compañía, es que estos dispositivos no tienen la suficiente RAM ni la capacidad de procesamiento como para correr Ice Cream Sandwich y la interfaz propia de Samsung, TouchWiz.
Lo raro es que el Nexus S, un teléfono que internamente es igual al Galaxy S, sí va a recibir la actualización a Ice Cream Sandwich. La diferencia, según Samsung, es que ese smartphone no ocupa TouchWiz (lo que es bueno o malo, dependiendo de a quién se le pregunte).