REDMOND.- Una de las gracias de Windows 8 es la innovación que trae respecto a la “arquitectura” sobre la que podrá correr el sistema operativo: en vez de funcionar sólo con computadores basados en x-86 (los clásicos modelos con procesadores Intel o AMD), Windows 8 también podrá funcionar en dispositivos basados en ARM (procesadores usados en dispositivos móviles).
Por lo mismo Windows 8 se podrá ser usado en tabletas ya que, al correr sobre ARM, se puede adaptar a distintos tamaños de dispositivos.
Ahora salió una información que podría favorecer a quienes hagan productos con Windows 8 basados en ARM: las tabletas con Intel serán mucho más caros.
La razón de esto sería que ni Intel ni Microsoft están interesados en subsidiar la producción de dispositivos con Windows. Fuera de esto, Intel dijo que tampoco haría descuentos en sus procesadores para tabletas ya que esto podría afectar las ventas de computadores. Esto haría que una tableta con Windows 8 y procesador Intel tenga un precio de entre US$ 599 y US$ 899.
El punto negativo que tendrían los dispositivos Windows 8 en ARM sería que no podrán instalar otro sistema operativo en ellos, a diferencia de los computadores. Microsoft detalló en un documento que todos los sistemas que usen Windows 8 sobre ARM deben eliminar la función para instalar otras plataformas. Esto buscaría prevenir que, por ejemplo, se usen tabletas con Windows 8 para también usar Android.