SANTIAGO.- "Everyone gives", iniciativa global que pretende convertirse en la campaña solidaria más grande del mundo, comenzó este miércoles y se extenderá por una semana, valiéndose del impacto generado por las redes sociales.
La actividad pretende conectar a personas en cualquier lugar del mundo para que donen un mínimo de US$ 5 a una institución contactada a través de la página web de la campaña. Cada uno deberá invitar a dos amigos para que hagan lo mismo, construyendo una suerte de "árbol de ayuda" internacional.
En nuestro país, la iniciativa es encabezada por la iniciativa Desafío Levantemos Chile. "Esto nace a partir de una empresa multinacional, Colliers, que se da cuenta que utilizando los medios de comunicación como Facebook, Twitter o Youtube, se podría lograr una gran colaboración en períodos cortos a proyectos concretos a nivel global", señaló Goran Ahumada, director ejecutivo de la entidad.
"Nos parece relevante saber cómo es el comportamiento de las personas en Internet cuando de colaborar se trata, ya que está en sintonía a la forma cómo operamos. Por ello, esperamos el apoyo de los chilenos durante la semana que va del 22 al 29 de febrero", agregó.
En total, más de 500 instituciones de distintos países participan en "Everyone gives". Entre ellas se cuentan las que cubren causas como la protección a los niños, del medio ambiente, de la igualdad de la mujer y la lucha contra el cáncer.
Desafío Levantemos Chile contribuye en el área de emprendimiento, en alianza con cinco universidades "con las que entregamos capacitación y consultoría a proyectos de menor escala", señaló Ahumada.
"Junto a ello, seguimos en la reconstrucción después del terremoto del 27-F, trabajando con las escuelas que levantamos. También estamos construyendo casas que no son rentables para las constructoras debido a su la lejanía geográfica", aseveró.
Desafío Levantemos Chile, creada por Felipe Cubillos, será la única propuesta nacional de caridad en "Everyone gives", para que tanto chilenos como extranjeros tengan la opción de contribuir y ramificar sus donaciones hacia la iniciativa que comenzó con el terremoto y hoy sigue explorando nuevas necesidades locales.
Lo importante, recuerdan los creadores de la campaña, es su "viralización" a través de la red, por lo que para ello se dispusieron cuentas nacionales en Facebook y Twitter.