La Arabidopsis thaliana, flor que los científicos ocuparon para el estudio, es la primera planta en tener su genoma totalmente secuenciado.
EFELONDRES.- Científicos británicos han identificado, luego de ocho años de estudios, un gen en las plantas que actúa como interruptor en su proceso de floración.
Los biólogos del Centro John Innes de Norwich, ubicado al este de Inglaterra, descubrieron que el gen PIF4 activaba el proceso de floración de las plantas cuando éstas alcanzaban una temperatura determinada.
"Nos preguntábamos cuál era el interruptor por el que las plantas florecían cuando se llegaba a una temperatura concreta. Descubrimos que en las plantas mutadas en las que este gen estaba inactivo, la floración no se producía en respuesta a la subida de la temperatura", explicó el biólogo Philip Wigge.
Para realizar el estudio los biólogos analizaron una pequeña flor conocida con el nombre científico de Arabidopsis thaliana, nativa de Europa, Asia y el norte de África y famosa por ser la primera planta en tener su genoma totalmente secuenciado.
"Elegimos esta flor porque se dispone de mucha información sobre ella, lo que nos permitía avanzar muy rápido en la investigación", detalló Wigge.
Existen dos mecanismos que permiten a las plantas responder a la llegada de la primavera: medir la duración del día y las alteraciones de la temperatura.
La mayoría de las especies vegetales han evolucionado para utilizar ambas señales, sin embargo, algunas ignoran una de estas dos fuentes de información y se centran en la otra para determinar el momento de su floración.
El gen identificado ahora por el equipo de Wigge parece estar presente en todas las plantas vasculares, que son aquellas que contienen raíces, tallo y hojas, lo que incluye a los árboles y a la mayoría de los cultivos.
Los científicos han podido contrastar este hallazgo con el mapa genético de otras especies, como el arroz o el trigo, y han comprobado que también cuentan con el gen PIF4.
Conocer el mecanismo por el que la temperatura afecta al desarrollo de las plantas podría permitir a los científicos alterar la temperatura mínima que necesita la planta para florecer.