Larry Page, dibujado durante el segundo día de comparecencia ante la corte en San Francisco. En EE.UU. está prohibido introducir cámaras en los jucios.
Reuters
SAN FRANCISCO.- Casi una hora permaneció en un tribunal federal de Estados Unidos el director general y creador de Google, Larry Page, para prestar declaración en un sonado juicio que enfrenta al gigante de Internet con Oracle Corp.
La disputa tiene que ver con presuntas violaciones a la propiedad intelectual ligadas al software Android.
Page se vio intranquilo en el banquillo de testigos, mientras evadía preguntas sobre su papel en el diferendo y discutía con David Boies, tenaz abogado que ganó renombre por interrogar al ex director general de Microsoft Corp., Bill Gates, en la demanda por prácticas monopolísticas que enfrentó esa compañía en la década de 1990.
Boies representa ahora a Oracle, que acusa a Google Inc. de crear su software Android con tecnología robada de Java, extendida plataforma de programación de su propiedad.
Oracle, basada en Redwood Shore, California, solicitó cientos de millones de dólares como indemnización y el pago de regalías por el futuro uso que haga Google de Android, usado hoy por más de 300 millones de equipos, entre teléfonos y tabletas.
No recordaba documentos
Durante el tiempo que pasó en el estrado, Page rara vez miró a Boies y con frecuencia dijo que no recordaba haber visto algunos de los documentos de Google que Oracle usa para sustentar su acusación.
Los diversos intentos que hizo el abogado para presentar evidencia que contiene información sobre Google fueron bloqueados por el juez federal de distrito William Alsup.
Parte de la evidencia que se mantiene reservada por la corte incluiría revelaciones sobre cuánto dinero ha hecho Google con Android desde que el software salió al mercado en 2008.
Boies pasó gran parte del interrogatorio tratando de demostrar que Page y otros ejecutivos de Google se dieron cuenta desde 2005 de que la compañía probablemente tendría que pagar por una licencia para usar elementos de Java.
Cuando se le mostraron a Page correos electrónicos del creador de Android, Andy Rubin, y de otros, en los que se mencionaba la necesidad de negociar licencias para obtener algunos componentes de Java durante 2005 y 2006, Page dijo que esas referencias tenían que ver con el intento de Google para desarrollar Android en sociedad con Sun Microsystems Inc., propietario de Java en ese entonces. Oracle adquirió a Sun en 2010.
El alegato de Oracle se basa en postular que Android infringe 37 patentes de interfaces de programación de aplicaciones (API, por sus siglas en inglés) que proveen las bases para hacer que Java opere de manera efectiva.
Otras grandes compañías, como IBM, han comprado licencias para algunas API de Java, pero Google no, algo que Page confirmó durante su testimonio del miércoles.
Google afirma que las API de Java no están cubiertas por la ley de propiedad intelectual de Estados Unidos porque no son una forma de expresión creativa.