La nave Shenzhou IX aterrizó sin problemas en Mongolia Interior.
AP
BEIJING.- La nave espacial china Shenzhou IX, lanzada al espacio el 16 de junio, regresó hoy a la Tierra tras completar con éxito el primer acoplamiento espacial manual que lleva a cabo el programa espacial de ese país.
Según la agencia de noticias Xinhua, el aparato tocó tierra a las 10:00 horas (22:00 horas en Chile) en una zona de aterrizaje ubicada en el condado de Siziwang, al norte de la región autónoma de Mongolia interior.
El sitio es que usualmente utilizan las Shenzhou para aterrizar.
Después de 13 días de misión, los astronautas Jing Haipeng y Liu Wang, junto a Liu Yang, la primera mujer china en viajar al cosmos, volvieron a casa en "buenas condiciones", según el equipo médico que los atendió.
La tripulación marcó un hito en China después de completar con éxito la cuarta misión tripulada llevada a cabo por el país asiático y conseguir realizar los primeros acoplamientos manuales entre una nave china y el módulo espacial Tiangong I, semilla de la futura base espacial del gigante asiático.
Adaptación a la gravedad
Tras aterrizar bajo un cielo azul intenso y las miradas de líderes chinos como el Primer Ministro, Wen Jiabao, quien presenció la operación en el Centro de Control Aeroespacial de Beijing, la tripulación confirmó su buen estado aún desde el interior de la cápsula.
"Hemos vuelto y nos encontramos bien", afirmaron en su comunicación con el centro de control.
"Este logro ha tenido un significado muy importante para la carrera espacial china", destacó el jefe de Gobierno chino tras
Los "taikonautas", nombre que se da a los astronautas en China (a partir del término "taikong", que significa "espacio" en mandarín), fueron recibidos con una breve ceremonia. Primero dedicaron cerca de una hora y media a adaptarse a la gravedad de la Tierra, antes de abandonar la cápsula.
El veterano comandante de la nave, Jing Haipeng, fue el primero en salir de la cápsula, con una gran sonrisa, que imitó su compañero y militar Li Wang, el segundo en abandonar el vehículo espacial, seguido por Liu Yang, de 34 años.
Yang fue la última en dejar la Shenzhou IX, y también mostró ser la más resistente, al conseguir ponerse de pie unos segundos antes de ser ayudada a sentarse por el equipo de médicos, a diferencia de sus compañeros de viaje.
China es el tercer país que consiguió llevar astronautas al espacio y quiere demostrar con su programa que está capacitada tecnológicamente para trabajar en bases permanentes en órbita.