Uno de los usos futuros del láser es la computación cuántica.
El Mercurio (imagen de archivo)BRUSELAS.- La Unión Europa (UE) buscará incentivar el desarrollo científico en zonas que formaban parte del antiguo Bloque Oriental a través de una inversión de US$ 900 millones para la construcción del láser más poderoso del mundo, que podría ayudar en la eliminación de los residuos nucleares y el tratamiento del cáncer.
El proyecto fue bautizado como "Extreme Light Infrastructure" ("Infraestructura de luz extrema") y considera la creación de dos poderosos láseres en la República Checa y Rumania, además de un centro de investigación en Hungría.
El proyecto cuenta con la participación de 13 naciones y contará con financiamiento de la UE, además de 180 millones de euros provenientes de privados.
Según publicó Bloomberg, los láseres construidos serán más potentes que cualquiera desarrollado hasta ahora, con la posibilidad teórica de poder crear partículas subatómicas en vacío. Ese poder también podría ser usado para eliminar en segundos los residuos dejados por plantas y centros de investigación de energía nuclear, acelerando un proceso que actualmente dura décadas.
Con energía geotérmica
Quizá el potencial más interesante del proyecto es la capacidad de eliminar tumores cancerígenos. Esto lo haría utilizando los mismos principios que un tipo de tratamiento actual llamado "hadronterapia".
Esta tecnología apunta a la eliminación de tumores avanzados y muy arraigados en el cuerpo, previniendo la posibilidad de un posible nuevo crecimiento posterior. El problema es que su uso es extremadamente caro y requiere un gran despliegue tecnológico.
"Si se vuelve posible aplicar este tratamiento con este nuevo tipo de láser, se podría implementar a un costo menor a medida que la tecnología avanza y los láseres se vuelven más baratos", afirmó Nicolae-Victor Zamfir, coordinador del proyecto en Rumania, a Bloomberg.
Para funcionar, los láseres requerirán una instalación especial para proveerles energía. En el caso del centro en Rumania se usará energía geotérmica para entregar los 10 megawatts necesarios.
Las primeras tres estaciones del proyecto (ambos láseres en Praga, República Checa y Magurele, Rumania; además del centro de investigación en Szeged, Hungría) estarían operativos en 2015. Mientras se construyen estos recintos se comenzará la postulación para la instalación de la cuarta etapa, el "ELI-Ultra High Field Facility", un láser que alcanzará una fuerza de 200 petawatts.